El año nuevo ha traído pocos cambios en la política. La Fiscalía da un nuevo portazo a Catalunya y sus instituciones proponiendo ahora una nueva querella contra la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, pero también, contra parte de la Mesa por haber permitido que se votaran las conclusiones del proceso constituyente.

Según publica La Vanguardia, la querella iría dirigida también a Lluís Corominas, Anna Simó, Ramona Barrufet -los tres de Junts pel Sí- y Joan Josep Nuet -de Catalunya Sí que es Pot (CSQP)- por ser conocedores de las resoluciones del Tribunal Constitucional (TC) y, aun así, sacar adelante la tramitación de las propuestas para alcanzar la autodeterminación de Catalunya.

Ya el pasado 14 de diciembre, el alto tribunal protagonizó la suspensión cautelar de las resoluciones aprobadas por el Parlament impulsando el proceso constituyente, entre ellas, la que daba apoyo a la celebración de un referéndum en 2017 con el aval del Estado o sin.

Contrario a la Constitución

El informe del fiscal, que ocupa 22 páginas, considera que la hoja de ruta es contraria a la Constitución y pide que se deduzca testimonios de particulares con el fin de "exigir la responsabilidad penal que pudiera corresponder" a los miembros de la Mesa del Parlament.

Precisamente por eso, la Fiscalía avisa de que tanto Forcadell como los otros cuatro miembros de la Mesa contaban tanto con las notificaciones del TC, como con la advertencia de la posible ilegalidad de la decisión de que tomaban y, a pesar de eso, salieron adelante con la votación.

Por todo ello, el fiscal pide la nulidad de las resoluciones aprobadas el 6 de octubre y que se vuelva a avisar a la presidenta del Parlament, así como al president del Govern, Carles Puigdemont, y otros miembros del Govern, que ha de cumplir con las advertencias del alto tribunal.