Ya hemos perdido la cuenta de las veces que la reina Letizia no ha hecho la señal de la cruz ante un santo. Hoy, coincidiendo con el patrón nacional de España lo ha vuelto a hacer. Dos veces por ser exactos: cuándo ha entrado y cuándo ha salido. La imagen ha sido captada por la Televisión de Galicia que ha retransmitido el acto de la festividad de Santiago de Compostela en directo. Nuevamente, el rey Felipe VI en la línea de la religión de su familia y Letizia al revés.
España es un estado aconfesional tal como establece el artículo 16,3 de la Constitución Española con su principio: "Ninguna confesión tendrá que ser de carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad y mantendrán las relaciones de cooperación con la iglesia católica y el resto de confesiones". Así pues, la Carta Magna excluye la posibilidad de un estado laico o independiente de cualquier organización o confesión religiosa.
Los principios de Letizia no cuajan con la aceptación de pasar por la iglesia el día de su boda. Una boda que contó con toda tipo de lujos y detalles en el Palacio Real de Madrid. Ahora que ya ha entrado en el reducido círculo de unos privilegiados a cambio del erario público, Letizia considera que no hace falta guardar las formas ni ser consecuente con lo que ha hecho anteriormente.
A buen seguro que Letizia se debe haber quedado a cuadros mientras escuchaba a su marido apelando al espíritu del Apóstol Santiago para combatir el coronavirus y "estar más unidos que nunca". De hecho, Felipe VI ha asegurado que de Santiago emana "la unidad de España y los europeos". Lástima que con la mascarilla, tan sólo hemos podido ver una parte del rostro de la reina mientras escuchaba su discurso: la mirada no era de aprobación.
Los Reyes han llegado al aeropuerto de Santiago de Compostela esta mañana. La vicepresidenta del Gobierno Nadia Calviño los ha recibido. Una vez han llegado a la plaza de Immaculada, han sido saludados por el presidente del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas, el presidente de la Xunta de Galicia Alberto Núñez Feijóo, el alcalde de Santiago de Compostela Xosé Antonio Sánchez Bugallo y el jefe de la Fuerza Logística Operativa Juan Francisco Arrazola. También han recibido el saludo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y los consejeros del gobierno gallego.