Quien tiene pequeños en casa, conoce de sobra a Anna, Elsa y a Olaf, los protagonistas de Frozen. La película de animación por excelencia de los últimos tiempos se ha convertido en uno de los clásicos de las fiestas navideñas y Telecinco ha vuelto a apostar por los dibujos de Disney para ocupar un sitio privilegiado en su parrilla.

Más que los personajes y la trama, lo más famoso de Frozen es su canción estrella: Let it go (Suéltalo, en castellano), ganadora en el Oscar a Mejor Canción Original. Cuando suena la contagiosa melodía con el potente estribillo es uno de los momentos más emocionantes y esperados de la película. Un momento mágico que Telecinco se cargó con anuncios.

Esta decisión dejó helados a los espectadores como si estuvieran en el Palau de hielo de Elsa. Mirad la cara de desolación de este pobre niño mientras de fondo se oye "Anuncios?! Pero que hijos de p...". Devastador.

Ni Pedro Piqueras con sus adjetivos más crudos sería capaz de expresar la atrocidad que cometió la cadena de Mediaset poniendo publicidad en el clímax de la peli. Tenían 109 minutos de largometraje para hacerlo y decidieron ponerla en el momento de máxima expectación para alegría de los anunciantes e indignación de los telespectadores.

Indignante.