En Catalunya hay eminencias mundiales en muchos ámbitos: el deporte, la música, la medicina... Pero si ha habido un número 1 catalán indiscutible, es Ferran Adrià. No solo porque encabezaba todos los rankings cuando estaba en activo sino, sobre todo, por el poso que ha dejado. El cocinero de L'Hospitalet ha transformado la gastronomía y su influencia mundial todavía perdura 14 años después de cerrar El Bulli. Desde entonces, Adrià se dedica a la investigación y a la difusión de sus ideas con El Bulli Foundation. Una entidad sin ánimo de lucro. Adrià, como presidente de la Fundación, decidió que no se pondría un sueldo. Nada. No cobra. Esta revelación explica el carácter de Adrià, que siendo el mejor del mundo podría ser multimillonario y, en cambio, vive sin ingresos, como ha declarado en el pódcast de Uri Sàbat La fórmula del éxito.

Ferran Adrià no se ha jubilado formalmente con 63 años y sigue teniendo algún ingreso por conferencias, pero que sirven para mantener su Fundación. Él no se queda nada: "Yo ahora soy una persona que no tiene ningún sueldo, casi no tiene ingresos. Porque todos los ingresos van a la fundación. Malo si tú haces una fundación donde ya te pones tú el sueldo. Además, una parte de mi patrimonio ya lo doné con Juli Soler [el socio de Adrià, ja ya fallecido] a la fundación cuando cerramos el restaurante". Adrià vive en pareja y no tiene hijos. Una buena manera de vivir sin ingresos y de que no se acaben los ahorros es gastar poco. El único lujo que se permite, según recoge el diario ABC, es comer de restaurantes: "La vida que llevo a nivel de vivienda, pues vivo en un sitio que está bien que pagué hace tiempo. A nivel de alimentación, me cuido mucho y sobre todo porque me gustan los restaurantes, es el único capricho que tengo. Pero, por ejemplo, no tengo coche, la ropa que llevo es una ropa normal y cada dos o tres años mi mujer me obliga a comprar ropa. Me gusta irme dos o tres viajes al año de vacaciones chulas, pero es verdad que siempre aprovecho alguna invitación que me hacen, algún premio para aprovechar y tal...".

Ferran Adrià vive como un jubilado desde los 50 años gracias a haber trabajado de sol a sol: "Yo trabajé como un cabrón durante 25 años con mi socio, 16 horas cada día, 330 días al año. Ya sé que la gente trabaja mucho y tal, pero no trabaja estas horas. ¿Para qué? Porque yo a los 35 años decidí que a los 50 me quería retirar. No quería que el dinero fuera algo por lo que yo me moviera, que nunca ha sido mi focus, pero sí comprendí que sin dinero no tienes las necesidades cubiertas, las básicas". Los chefs acostumbran a ser pésimos administrando dinero. Como los pintores o los poetas. Ferran Adrià, un genio.