La edad y las continúas lesiones complicaron la vida de Rafa Nadal. Aunque se resistía a abandonar las pistas, no le quedó más remedio. Ahora todo ese tiempo libre lo dedica a su familia. Este pasado mes de agosto nació su segundo hijo, Miquel. Además, el mallorquín tiene muchos negocios más allá del tenis, su gran pasión. Sin embargo, en estas últimas semanas no ha podido disfrutar tanto como querría tras un nuevo bache de salud. Esta semana ha preocupado a sus seguidores al pasar por quirófano de nuevo.

El pasado jueves tenía programada una intervención quirúrgica en la Clínica Teknon de Barcelona, donde se le ha practicado una cirugía en la mano derecha. Presentaba una artrosis severa que requería ser intervenida, como así han detallado desde la agencia EFE. Explican que la operación se ha centrado en la “artrosis severa de la articulación trapecio-metacarpiana”, la encargada de unir la base del pulgar con la muñeca y en la que intervienen el hueso trapecio y el primer metacarpiano.
Rafa Nadal operado de la mano derecha por artrosis
No está para nada asustado, ya que ha vivido cosas peores, y en esta ocasión ni tan siquiera debe ausentarse de los terrenos de juego ya que se ha retirado. Sufría mucho cuando padecía una lesión que le obligaba a apartarse temporalmente. A él le enseñaron a jugar y ganar esforzándose al máximo. En este caso la intervención era necesaria, ya que llevaba mucho tiempo con un gran dolor.
El médico ya le ha comunicado que debe portarse bien y mantenerse unas semanas en absoluto reposo con el cabestrillo y el brazo escayolado. Rafa Nadal se ha encargado de dar el parte médico a sus seguidores tras haber salido de quirófano: “He tenido que someterme a una intervención en la mano por un problema que venía arrastrando desde hace mucho tiempo, pero ¡espero estar bien pronto!”, concedía el tenista para tranquilidad de todos.
Era muy importante quitar ese dolor, pero también mejorar su movilidad por comodidad. De momento no se puede hacer ninguna valoración, ya que solo han pasado 24 horas desde la intervención y necesita que pasen varios meses de rehabilitación para empezar a ver mejorías. No obstante, como siempre le ha caracterizado, se ha mostrado muy positivo y con un gran sentido del humor: “Me parece que no podré jugar el Australian Open en enero”. No entraba en sus planes, pues de hecho está retirado de las canchas de tenis. Antes le preocupaba mucho.
