El caso de Xavier Novell, obispo emérito de Solsona, ha estallado alborotando la opinión pública. Una historia que empezaba con su renuncia al cargo eclesiástico por razones sentimentales, enamorado de una mujer, la escritora y psicóloga Sílvia Caballol, y abandonando los hábitos y el celibato para vivir en pareja. La sorpresa, terrible y desagradable, ha sido la aparición de testimonios que situaban a Novell detrás de supuestas terapias para "curar" a los homosexuales y reconducirlos a la heterosexualidad, con prácticas que incluían exorcismos. El escándalo es mayúsculo y ha dejado en shock a Pilar Rahola, que precisamente participó anoche en el capítulo del 'Todo es verdad' (Cuatro) de Risto Mejide dedicado íntegramente a explicar el caso.

Rahola, con su maestría habitual, hace este preámbulo: "Parecía "el pájaro espino" de la curia catalana, el hombre de Dios que quedaba seducido por amor, y que por amor dejaba los hábitos. Muchos desarrollamos una corriente de simpatía hacia el Obispo Novell. ¿Quién puede estar en contra de que la gente se enamore?". No le falta razón. Ahora bien, todo cambia cuando se ha sabido la totalidad de la historia, y que convertía este amor en "una cortina de humo y un muro que tapaba realidades desgarradoras y denunciables".

xavier novel|novato obispo solsona acn

Xavier Novell, exobispo de Solsona / ACN

Rahola sentencia al exobispo al conocer sus prácticas homófobas para sacar a los gais de su condición sexual y llevarlos "hacia el camino "natural", el "buen camino" de la heterosexualidad". Pilar atiende a la denuncia de Sor Lucia Caray y los testigos que aseguran qué Novell hacía procedimientos para "echar" al demonio de la homosexualidad, y los califica de delitos de odio. "No sabemos si el obispo se ha enamorado de esta chica o si él mismo era un gay reprimido que se había sometido a las prácticas para reforzar su heterosexualidad, tales como repetir "soy un hombre, soy un hombre", como si ser un hombre estuviera ligado a la condición sexual". Lo expresa con contundencia: "Detrás de esta historia de amor lo que había era un homófobo, y lo que hay es una práctica integrista, la utilización de las creencias religiosas y del concepto de Dios para ir en contra de la orientación sexual de una persona"

La escritora dirige una serie de preguntas a la Iglesia Católica y a sus estamentos, y que harían bien en responder lo antes posible y actuar sin miramientos: "¿Cuántas personas de la Iglesia conocían estas prácticas? Es imposible que lo hiciera solo, pero nadie lo amonestó. Por lo tanto, lo permitieron. ¿Son normales estas prácticas? Y en cuanto al Papa Francisco, el Papa 'progre': ¿convertirá la homofobia en una impunidad? Acabará la discriminación que late en muchos sermones?". La periodista lo tiene claro: la Iglesia tiene que ponerse en marcha contra este tipo de actitudes, porque "no estamos en la Edad Media. Tenemos que militar en el respeto y la tolerancia, no en la maldad". La receta es sencilla: "¡Protocolos, denuncias cuando se produzcan y expulsión directa! ¿O harán como con los pederastas y lo taparán? El caso Novell no ha sido un caso de amor, más bien lo contrario: es la punta del iceberg de un caso gravísimo de odio". Palabra de Rahola.