"He aquí un dragón que era tan pequeño y alfeñique, que tenía vergüenza de decir que era un dragón porque parecía un ratón enclenque. Vivía en la habitación de un niño que se llamaba Jordi, pero nunca salía de la montaña de peluches porque Jordi nunca lo escogía". Así empieza En Jordi i el drac petaner, "una pequeñísima aventura literaria, pero sobre todo, una aventura personal y emocional que nunca habría imaginado que haría y que al final, cuando me decidí, ha sido extraordinaria de vivir".
Son palabras de una más emocionada que nunca Pilar Rahola, hablando de un cuento precioso que tiene una razón de ser.
La gente de la Estrella Polar, la colección mítica de cuentos, le preguntó si se vería con ánimos de hacer un libro de cuentos para sus nietos. ¿Su reacción inicial?: "Que no, que ni hablar, no sabía cuál era el registro, yo soy una persona que escribe para los adultos". Pero entonces, le formularon una pregunta muy sencilla: ¿"A tus hijos, cuando eran pequeños, no les explicabas cuentos? A tus nietos no los explicas cuentos"?.
La escritora pensó y se dio cuenta que sí, que siempre lo ha hecho, "además, cuentos inventados, historias imaginativas, algunas con un poco de miedo, otras, con mucho suspense. Y pensé: 'Quizás me puedo poner manos a la obra'". Y así ha surgido esta deliciosa historia donde el protagonista es Jordi, "mi nieto, el héroe... Todos los niños son héroes en sus cuentos".
El nieto de Pilar tiene un peluche que es un dragón muy enclenque, de color verde, "que está triste porque no parece un dragón. Pero gracias al mago de los sueños, por la noche, cuando Jordi está soñando, se convierte en un gran dragón, el dragón 'Diente de fuego'. Cómo mi nieto quiere, adora y está fascinado por el mundo de los dinosaurios, me pareció que valía la pena juntarlo todo".
Y dicho y hecho. El dragón en cuestión ayuda a Jordi a salvar el mundo de los dinosaurios. Una historia preciosa, "que además, está muy bien dibujado". El autor de los dibujos es Cèsar Barceló, "maravillosas sus ilustraciones. Supo captar perfectamente los mundos que había imaginado, cada mundo que visitan, además, es de un color diferente". Un viaje por los mundos de los colores, el país de los rosas, de los amarillos, para salvar el mundo desaparecido de los dinosaurios. Y en cada mundo, los protagonistas tienen que superar pruebas y engaños.
De hecho, ha quedado tan bonito el resultado final que los de la editorial lo han editado en formato regalo. Es una historia mágica, un cuento de los de antes, donde además de su nieto Jordi, también salen su gato y su hermano Joan. Además de la orgullosa autora y abuela, a quien el ilustrador también ha dibujado:
Rahola confiesa que "ha sido una aventura emocional preciosa. Me lo he pasado pipa", y quién sabe si lo volverá a probar, esperemos que sí. "Espero que os sea bonito, yo lo he hecho con mucha estima e imaginación, un cuento cerca del fuego, de los de antes":
Disfrútenlo... Y sobre todo, léanselo a sus nietos e hijos.