Son muchas las actrices de Hollywood que se han unido al movimiento me too, donde se denuncia y se visibiliza el acoso y el abuso sexual. Penélope Cruz también ha contado haber vivido alguna vez una situación como ésta, especialmente cuando en Estados Unidos aún no era muy conocida. Fue en un casting, donde le pusieron varias escenas de desnudos que no estaban inicialmente y no pensaba realizarlas. No lo admitió, prefirió perder ese gran papel a los 21 años.
“Cuando llegué allí, con un tremendo jet-lag, ellos me dijeron: ‘Oh, tenemos que verte en la oficina’. Querían añadir algo a [mi contrato]. Dijeron: ‘Si quieres hacer la prueba de pantalla, tienes que aceptar que en la película habrá algunas escenas de desnudos que no estaban en el guión’”, relata Cruz. “Les dije: ‘¿Por qué no me contasteis eso hace 24 horas, antes de subir al avión?’ A pesar de que ya había rodado películas que tenían escenas de desnudos... en ese momento no quería pasar por eso”, concluyó.
Jennifer Lawrence narra un episodio de acoso y abuso sexual
El revuelo volvió a sacudir a Hollywood después de que Jennifer Lawrence decidiera hablar con absoluta franqueza sobre algunos de los episodios más incómodos que ha vivido en su carrera. La ganadora del Óscar participó recientemente en el pódcast Las Culturistas, donde abordó sin filtros la presión y las dinámicas tóxicas que, según explica, todavía persisten entre determinados actores de la industria.
Lawrence reveló que en más de una ocasión se ha encontrado con compañeros que reaccionan de forma negativa cuando ella marca límites claros. “Muchos actores se ofenden si no quieres acostarte con ellos”, confesó. Según explicó, lo más perturbador no era el intento en sí, sino lo que venía después: “Cuando dices que no, entonces empieza el castigo”. Describió cómo el ambiente en el set puede volverse tenso, distante y hasta hostil.
Las declaraciones llegan en plena promoción de su nuevo proyecto, “Die My Love”, una película que protagoniza junto a Robert Pattinson. La actriz quiso dejar claro que el intérprete de Crepúsculo no tiene nada que ver con estas experiencias negativas. “Con Rob me sentí completamente segura. No es un pervertido, está profundamente enamorado de su pareja y hablábamos principalmente de nuestros hijos”, relató.
Lawrence explicó incluso que, a diferencia de otras producciones, no fue necesario recurrir a un coordinador de intimidad durante el rodaje, ya que tanto ella como Pattinson tuvieron una comunicación abierta sobre los límites profesionales en escenas sensibles. La película, dirigida por Lynne Ramsay y basada en la novela de Ariana Harwicz, sigue a una mujer que atraviesa un fuerte deterioro emocional tras el nacimiento de su bebé, un papel que Lawrence interpreta con una intensidad que, según ha dicho, la dejó emocionalmente agotada.
En medio de la promoción, ambos actores concedieron una entrevista conjunta a Vanity Fair, donde surgió una pregunta inesperada: ¿qué saga es mejor, Los juegos del hambre o Crepúsculo? Pattinson lanzó la provocación con humor, y Lawrence, contra todo pronóstico, eligió la historia de los vampiros. “¿Crees que Los juegos del hambre es más ‘cool’ que Crepúsculo?”, preguntó él. “No”, respondió ella tajantemente, entre risas.
