Polònia fue el jueves el programa más visto de todas las cadenas con un fabuloso 17,3%. Es el mejor prime time de toda la semana de TV3. El gran contraste es que minutos después el Alguna pregunta més de Antoni Bassas se hunde a la mitad haciendo una media de 9,7% y llegando a caer al 5%. Esto viniendo del programa de más audiencia de TV3 es grave. Según publicó en julio en exclusiva EN Blau, los jueves se estrenará el nuevo programa de Gerard Romero en el lugar del APM. Los espectadores de la TV pública quieren humor pero atrevido, arriesgado, valiente y crítico. Y el Polònia de Toni Soler esta temporada ha empezado muy fuerte. Se nota con un detalle: la imitación de Sílvia Orriols. Ya era un personaje muy conocido cuando era alcaldesa de Ripoll y desde hace un año y medio como diputada en el Parlament era carne de Polònia, pero el programa se resistía. Son veteranos, saben lo que se hacen. Orriols lidera un partido de obediencia catalana, no es como el PP o Vox. Parodiarlos sale más caro en redes que cuando se hace mofa del resto de partidos. Pocos votantes de Vox o PP tienen TV3 como su tele de referencia. En cambio, la inmensa mayoría de los votantes de AC miran TV3. Y cuando les tocan a Orriols, saltan a la yugular.

Orriols de Polonia, TV3
Orriols de Polonia, TV3

Orriols es la gran imitación de esta temporada del Polònia, no la dosifican, aparece en cada programa. Ha sido en el tercer Polònia que le han dado la pieza más codiciada, la más viral, la más trabajada, la que suele hacer más audiencia: el musical. Y lo han clavado: una Orriols versionando una mítica canción catalana, el cuplé “El còctel de l’amor' que estrenó el padre de Mary Santpere en 1932 y que popularizaron su hija Mary Santpere y Guillermina Motta rebautizándolo con el nombre más conocido de "Remena nena". En can Polònia estuvieron brillantes y sale Orriols en un formato de tele antigua, como de programa de TVE de Miramar, cantando Remena el mena, por la obsesión de Orriols y su partido islamófobo con los menores extranjeros no acompañados. El gag lo tiene todo: la imitación, el referente, la letra, la crítica a Orriols y a todos los partidos que no saben cómo confrontarla: Illa, Turull y Junqueras. Uno de los mejores gags de la historia de Polònia:

Batet, Orriols y Turull, TV3
Batet, Orriols y Turull, TV3

La letra es tan directa que merece ser destacada en algunas estrofas sobre el cóctel populista de Orriols para encajar sus manías, conseguir dos diputados y según las encuestas muchos más: "Hay que mezclar muy bien el fango para que el discurso haga diana. Se tiran dentro del bote fake news de inmigración y remueve al mena. Si la demagogia es buena el votante vas convenciendo. Si la encuesta les sale bien los otros nos cagamos, cada vez tienen más gente. Cinco gotas de nicabs, dos rayos de proceso, un poco de abuelo atracado, tres gramos de botifler, te sientas delante de twitter y con mil bots obedientes a tus Joseps Maries puedes poner calientes. Dice que quiere echar a los moros, es como Vox pero sin toros. Remueve y nadie nos frena". Los orriolistas van a la guerra contra Polònia:

El último tuit es un buen resumen de lo que supone ver Polònia después de 20 años en emisión sin entender qué es Polònia. Pero los orriolistas suelen ser muy agresivos en redes. Este año el community manager de Polònia debe pensar en los moderadores de contenidos de META (Facebook, Instagram, WhatsApp y Messenger) que sufren ansiedad y estrés postraumático.