Siempre acompañado del piano, Pablo López es uno de los extriunfitos que no se hizo con la medalla de oro, pero consiguió triunfar en los escenarios. Uno de los cantantes más exitosos de la industria española, sus letras y canciones consiguen conmocionar a todo el público. Sí, él también fue la excepción que confirmaba la regla de que a veces no hay que quedar en primera posición en un concurso para ser el primero en las listas de éxito de la música. Es indiscutible, al leer su nombre siempre nos viene a la cabeza su imagen tocando el piano, sus actuaciones no se entienden sin verlo tocar el teclado. Eso sí, lejos de los escenarios nos cuesta averiguar más detalles sobre su vida privada, casi no conocemos nada más allá de su pasión con las teclas del famoso instrumento, otro talento es pasar desapercibido. Ahora, con el estreno de su gira por España, lo hemos podido ver en otros medios, concibiendo entrevistas donde hemos podido descubrir algún secreto que nos ha dejado atónitos.

La magia que desprende con el piano es irrebatible, su interpretación, mientras canta las canciones y toca el piano, le hace moverse con unos movimientos particulares, es la esencia de sus actuaciones. Conectar con el instrumento a veces lo transforma, pero en una de las últimas apariciones públicas desconcierta a todo el mundo. Al principio de año se emitía el especial homenaje a María Teresa Campos, un programa especial dedicado a su trayectoria donde participaban amigos y compañeros de profesión entre los cuales no pudo faltar la actuación del artista. Fue justamente durante el espectáculo que la red comentó su comportamiento extraño, todos conocemos como se mueve sobre el escenario, pero su intervención en el programa preocupaba a los fanáticos. Con la voz temblona, declaraba el siguiente "Es que aún me veo frente a ella, allá donde esté no, ella está, o sea quiero decir, antes no estaba, la vi y sigue estando en el mismo lugar para mí. Tengo esa suerte, que no tenéis algunos, ella sea estando para mí" Unas palabras sin sentido que lo hacían señalar ante la red.

El momento se viralizaba entre los internautas que muchos de ellos lo acusaban de ser consumidor, ya que aparentemente parecía más nervioso del habitual, su actitud iba más allá de su personalidad habitual. Sin embargo, en su última aparición en el programa de Martínez y Hermanos se confesaba sobre un problema que, después de estos meses de margen, podríamos relacionarlo con este momento tan confundido en la red. Resulta, pues, que el cantante es un hipocondríaco extremo, de hecho sufre concretamente de hipocondríaca empática, esta le provoca un sufrimiento constante sobre su salud, pero a un nivel superior, él va más allá que angustiarse por un dolor de cabeza. "Empiezo a temblar. Incluso a veces lo siento en órganos del cuerpo que no tengo" empezaba a relatar al artista.

Pero el ejemplo que nos ha hecho alucinar es el siguiente: "Mira, mi prima Mari Carmen que es de Huelva y ha ido al hospital y le han dicho que...no sé qué. Yo me tengo que ausentar un momento para asimilar que yo no soy ni de Huelva ni soy Mari Carmen. Pues eso me pasa a mí" Entre carcajadas y humor, Pablo López destapaba un problema que le debe angustiar la mayor parte de los días y, después de enterarnos de esta característica, quizás podríamos atar hilos con el anterior momento que os hemos explicado. Poder escuchar los últimos días de María Teresa Campos lo hicieron poner más nervioso de lo habitual, poder incluso aquel día le había surgido un dolor de cabeza inesperado que lo hacía angustiar, y por eso aparecía más temblón que nunca.

Pero bien, como dice el refrán, "si el río suena, agua lleva", quizás es mejor que nos quedemos con la imagen de Pablo López y el piano.