"Sé que soy carne de televisión porque soy una tía bastante agresiva". Es una de las afirmaciones de Oriana Marzoli antes de entrar en La casa fuerte, el reality del verano que Mediaset estrenó hace justo un mes. La venezolana residente en España, ultraderechista orgullosa y simpatizante declarada de Vox, es famosa por su participación en incontables concursos, como Supervivientes y Gran Hermano VIP, así como su largo historial de violencia televisada. Esta semana, con un nuevo episodio de agresiones en Telecinco que ha levantado una oleada de indignación contra ella.

Oriana Marzoli Telecinco

Oriana Marzoli | Mediaset

Los hechos ocurrieron el miércoles por la tarde, después de una conversación entre la mediática Fani y la misma Oriana, en la que la primera explicó a la segunda que se las había tenido con la navarra Maite Galdeano el día de su cumpleaños, porque la había despertado de buena mañana con una cacerolada. Así que Marzoli decidió devolvérsela. Cazuela en mano, fue a buscarla a la piscina, y allí la encontró tomando un baño, sola, sobre un flotador porque el agua le da pánico. Picando con fuerza y discutiendo a gritos, la situación se le fue de las manos cuando, en un ataque de ira, le saltó encima, con la pierna por delante para impactar directamente contra ella. "A mí me da fobia el agua y lo paso fatal. Se me ha hundido toda la cabeza, he tragado agua, me duele muchísimo la garganta por el cloro", explicaba Galdeano después del lamentable incidente.

Pero es que no es la primera vez que Oriana agrede a alguien en un concurso. Más allá de los realities que ha hecho en España, también ha participado en un montón de programas de la televisión chilena. Cuando estuvo en Amor en prueba, el equivalente a La isla de las tentaciones español, generó un gran escándalo después de insultar y desear la muerte de otra concursante; en Volverías con tu ex, la dirección la echó porque amenazó a otra con quemarla con una plancha de pelo y llegaron a las manos; y en Doble tentación también acabó en la calle después de estampar una silla contra una puerta cuando se peleaba encarnizadamente con su novio.

Esta vez, la audiencia pide su expulsión. En las redes sociales ya hay espectadores movilizados para que la echen. Telecinco tiene la última palabra.