Jorge Javier Vázquez aprovecha cualquier oportunidad para abrirse en canal y mostrarse transparente. Le encanta hablar de su vida privada en la columna que tiene en Lecturas, una táctica que utiliza recurrentemente.
La última confesión que ha hecho tiene que ver con su familia, un tema que no acostumbra a tratar mucho. De hecho, hace unos meses sorprendió a todo el mundo al conceder una exclusiva que presentaba públicamente a su madre. ¿La excusa? Comentar cómo había sido su primer mes de soltero.
En alguna entrevista anterior había explicado que su infancia fue bastante dura, ya que se sentía solo a pesar de vivir con sus padres y sus tres hermanas en un piso muy pequeño: "Hasta los ocho años compartí cama con mi hermana, ¡que tiene diez años más que yo!".
Siempre ha dicho que está unido a su madre, pero ahora ha confesado que no tanto a sus hermanas. ¿Y esta revelación? Estaba comentando que hace meditación, un rato de relax en la que recuerda el pasado "con una sonrisa pero sin nostalgia": "Recuerdo tanto cuándo era pequeño y viajábamos por toda España con la música de Protagonistas de Luis del Olmo de fondo. A mi padre le encantaba conducir de madrugada y contemplar los amaneceres con aquella música. Me gusta recordar aquella época en la que estábamos los cinco".
Lo que más destaca, como decíamos, es lo que dice sobre sus hermanas: "Hablo poco de ellas, supongo que por respeto. Llevan una vida totalmente ajena a mi movida y evito pringarlas aunque sé que están muy orgullosas de mí. Nos separan diez y ocho años, yo soy el pequeño, y quizás por eso no estuvimos tan unidos. Pero con el tiempo se ha ido forjando una relación en la que no tiene cabida ningún mal rollo. Hemos aprendido a respetarnos y, sobre todo, a comprendernos".
Hasta aquí bien, pero continúa el relato afirmando que no tiene la típica familia que se reúne cada fin de semana para ponerse al día: "Me considero afortunado al tener una familia que no me provoca quebraderos de cabeza. Nos vemos muy poco y no nos hablamos tanto, pero sabemos que si nos necesitamos, basta con decirlo. Yo pensaba que para mantener a una familia unida era fundamental comer juntos los domingos, Navidad y Reyes como mínimo. Qué equivocado estaba. Para mantener unida a una familia es importantísimo saber que por encima de la cantidad a veces que los miembros se puedan llegar a ver es mucho mejor optar por la calidad".
La vida familiar de los personajes más mediáticos interesa, y mucho. ¿Empezarán ahora las revistas del corazón a investigar qué hay detrás de esta fría relación?