Después de haberlo presentado prácticamente todo en Telecinco, el futuro de Jordi González en la cadena es incierto. Este domingo por la noche, el presentador catalán ha conducido el último debate de la edición actual de Supervivientes. Es público que Mediaset no lo quiere para el reality que estrenan en verano, La casa fuerte. Al frente estarán Jorge Javier Vázquez y Sonsoles Ónega. González sabe que ya no cuentan con él y ha acabado el programa con un mensaje de despedida bastante extraño que ha generado todo tipo de especulaciones.

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"Yo creo que la gratitud si no se expresa no vale nada. Quiero dar las gracias de corazón a Paolo, a Manolo, a Jaime, a Paco, a Alfredo, Angelo y a Cristina por la confianza que han depositado en mí", se ha dirigido a Vasile y el resto de directivos antes de cambiar de tema. Un adiós frío, helado. No ha dicho nada más que eso. Ni siquiera cuándo una de las colaboradoras, la mediática Gloria Camila, le ha dicho que lo echaría de menos: "Muchas gracias y nos vemos más pronto que tarde... ¿puedo ya cerrar esto?".

Ambiente enrarecido en el plató y rumores sobre una posible marcha definitiva, por la puerta de detrás. Entre los espectadores hay quien lo celebra. Últimamente, Jordi González ha sido duramente criticado en las redes sociales por su actitud a la hora de presentar las galas. Algunos han llegado a decir que hace el trabajo sin ningunas ganas. La misma sensación que les despierta a ellos verlo en la tele. Y es que a menudo ha parecido que el presentador no estaba del todo a gusto con el formato.