Atrás quedaron los tiempos en los que Jesulín de Ubrique acaparaba titulares por sus faenas en la plaza. Hoy, el protagonista no es el capote ni el estoque, sino una confesión íntima que ha dejado al mundo del corazón completamente consternado. El torero ha admitido, en círculos muy reducidos, que no estuvo a la altura como padre de Andrea Janeiro. Fuentes cercanas aseguran que Jesulín vive con una pesada carga emocional, pero también señalan que este distanciamiento no fue una elección voluntaria, sino el resultado de una relación “tóxica” con Belén Esteban que lo ha alejado de su hija durante tantos años.
Esta revelación se produce en un momento clave. Jesulín se había preparado para reaparecer el pasado 17 de mayo junto a Ortega Cano en La Lastrilla, pero una baja médica de último minuto lo dejó fuera del cartel. Los rumores apuntan a que esta retirada podría estar relacionada con el episodio cardíaco que sufrió hace unos meses, una experiencia que lo obligó a detenerse y reflexionar profundamente sobre su vida. En esa pausa impuesta por la salud, afloraron los fantasmas del pasado, en especial uno con nombre y apellidos: Andrea Janeiro Esteban.
Andrea Janeiro, la gran ausente en la vida de Jesulín de Ubrique
El silencio de Jesulín sobre su hija ha sido tan sonoro como su fama. Sin embargo, en privado, el torero ha empezado a derribar el muro. Ha reconocido que siente un dolor profundo por no haber estado a la altura como padre, especialmente durante la infancia y adolescencia de Andrea. Según testigos de sus confesiones, habría mencionado entre lágrimas que debería haber estado allí para ella.
Pero también justificó su ausencia en la complicada y mediática relación con Belén Esteban, a quien acusa de haber dificultado su papel como padre. No obstante, su discurso ya no es de reproche, sino de búsqueda de redención. Jesulín quiere recuperar el tiempo perdido y está dispuesto a dar pasos concretos para acercarse a su hija mayor. Sin embargo, el camino está plagado de obstáculos, y el más grande tiene rostro de mujer: Belén Esteban.
La eterna guerra con Belén Esteban: ¿puede Jesulín reparar lo que el pasado destruyó?
Aunque el torero intenta mantener un perfil bajo, Belén Esteban no ha tenido reparos en exponer públicamente la falta de implicación de Jesulín en la vida de Andrea. La colaboradora de televisión ha sido tajante al revelar que el padre de su hija ni siquiera se molestó en felicitarla en fechas señaladas. "Por no hacer, ni la ha llamado en estas Navidades. Si no lo digo, reviento. Me callo por ella", soltó recientemente la tertuliana con evidente decepción. Las palabras de Belén han hecho que la opinión pública vuelva a mirar con lupa cada movimiento del torero.
Mientras tanto, Andrea Janeiro, conocida por su extrema discreción, no se ha pronunciado de manera pública, pero cercanos a la joven aseguran que está receptiva, aunque con reservas. Según fuentes próximas, la joven siente curiosidad y deseo de recuperar parte del vínculo perdido, pero la desconfianza sigue latente. No es fácil olvidar años de silencio, ausencia y promesas rotas. Ahora más que nunca, Jesulín de Ubrique se enfrenta a su faena más compleja, y no hay muleta que lo salve. La reconstrucción del vínculo con Andrea Janeiro depende de gestos constantes y sinceros. Sabe que necesita más que palabras bonitas: tendrá que demostrar con hechos que quiere ser parte de su vida, sin condiciones ni excusas.