Cuando parecía que Isabel Pantoja no podía generar más titulares explosivos, un nuevo escándalo sacude los medios nacionales. La tonadillera habría puesto rumbo a República Dominicana, no por amor ni por nostalgia de escenarios pasados, sino por algo mucho más terrenal: esquivar las garras de Hacienda. Con una deuda millonaria que arrastra desde hace más de una década, la viuda de Paquirri ha decidido cortar por lo sano y abandonar España. La noticia, adelantada por el periodista Antonio Rossi, no ha tardado en levantar sospechas. No es casual que la artista elija precisamente un país con una de las cargas fiscales más ligeras del continente americano, donde los residentes solo tributan por lo que ganan dentro de sus fronteras. ¿Coincidencia? Difícil de creer.
Residencia en el Caribe y evasión legal: la nueva estrategia de la tonadillera
La mudanza de Isabel Pantoja a República Dominicana no es una idea improvisada. La cantante ya conoce el país, mantiene allí una base de fans y ahora suma una motivación crucial: beneficios fiscales casi paradisíacos. En este contexto, su millonaria deuda en España (que superó los 4 millones de euros y que aún mantiene parcialmente viva) podría quedar relegada a un segundo plano si sus ingresos futuros no pasan por el filtro de la Agencia Tributaria española.
La estrategia se ha materializado con la venta masiva de propiedades. El ático en Fuengirola, su casa de El Rocío y hasta su residencia en Sevilla han sido hipotecadas para saldar cuentas pendientes. Este éxodo patrimonial no solo indica urgencia económica, sino también la voluntad clara de romper con todo lo que la ancle a España. Y lo más importante: hacerlo sin dejar de generar ingresos, pero sin pagar los mismos impuestos.
Letizia y el misterio caribeño: vínculos sospechosos y bienes ocultos
Pero lo que realmente ha encendido las alarmas es la sorprendente coincidencia con la reina Letizia. Según medios británicos, la consorte del rey Felipe VI también tendría vínculos con República Dominicana, donde supuestamente habría adquirido una lujosa mansión. Aunque no existen documentos oficiales que lo confirmen, la opacidad con la que se maneja el patrimonio de la reina solo alimenta la sospecha.
A diferencia de su esposo, cuyo patrimonio fue publicado en 2022, Letizia no ha presentado ninguna declaración de bienes. Este silencio institucional abre la puerta a todo tipo de conjeturas. Según el periodista Joaquín Abad, se habla de más de 14 millones en activos gestionados fuera del país. La sombra de una presunta manipulación en la estructura financiera se proyecta, inquietante, sobre el Palacio de la Zarzuela.
Y como si fuera una serie de espionaje, la Unidad Central Operativa (UCO) habría accedido a grabaciones que comprometen directamente a Letizia. Según la periodista Maica Vasco, especializada en Casa Real, la reina habría solicitado asesoramiento directo al presidente Pedro Sánchez para trasladar dinero a República Dominicana. Las conversaciones, lejos de ser casuales, habrían sido reiteradas y con un objetivo claro: buscar fórmulas para mover su fortuna sin dejar rastro en España.
El periodista Javier Castillón ha ido más allá y plantea la gran pregunta: “¿Por qué República Dominicana? ¿Y por qué Sánchez?”. Según él, el presidente mantiene contactos de alto nivel en el país caribeño, lo que habría facilitado esta operación encubierta. Lo que parecía una simple mudanza de una artista caída en desgracia se ha transformado en un torbellino de sospechas, dinero oculto y conexiones peligrosas. Isabel Pantoja y la reina Letizia, aunque separadas por títulos y orígenes, habrían encontrado en República Dominicana una salida común a sus respectivos quebraderos de cabeza financieros.