Federico Jiménez Losantos vuelve a hacer de las suyas. Es decir, el insulto. El periodista y propietario de Libertad Digital y Es Radio, medios abiertamente reaccionarios y uno de los favoritos de la parroquia ultra, tiene una debilidad. Y no, no hablamos de Pablo Iglesias, Irene Montero, los independentistas o todo aquello que le hace hervir la sangre. El de Teruel disfruta todavía más atacando a un presentador de televisión, el más famoso de España: Jorge Javier Vázquez. El intercambio de reproches entre ambos es casi un género periodístico propio, pero desde hace un tiempo el de Badalona ha sumado un nuevo elemento al odio visceral que le profesa el locutor: el culebrón Rocío Carrasco.
El chicle de la hija de Rocío Jurado se estira hasta el infinito en Telecinco. Ya no interesa tanto al gran público, agotados con los programas, las tramas, los personajes y todo aquello que rodea a la denuncia pública de Carrasco contra Antonio David Flores y el resto de miembros de su familia, con los que no se dirige la palabra. Pero los muy cafeteros todavía han seguido con atención las novedades y los giros de guion que van surgiendo en los platós de Mediaset, ahora con 'En el nombre de Rocío', que ha llegado a su final. Cafeteros que están divididos en dos bandos irreconciliables, se detestan. Ya se pueden imaginar que Vázquez y Jiménez Losantos no comparten trinchera, todo lo contrario. Uno es el mejor aliado de Rocío, el otro el portavoz oficioso de Antonio David y compañía. No hay un día sin batalla.
Vázquez invitó al 'Deluxe' a Raquel Mosquera, expareja de Pedro Carrasco, padre de Rocío Carrasco. Una mujer a la que acusan de hacerle el juego, precisamente, a los postulados antiRociíto. El de 'La Fábrica de la Tele' es muy beligerante contra este sector y contra Mosquera en particular. La emisión del sábado fue un fusilamiento contra Raquel, desmontando sus incongruencias e inconsistencias, que son muchas. Un comportamiento que hace subirse por las paredes a Losantos, abogado del diablo de causas diversas. El primer sopapo, directo al mentón: le acusa de "maltrato a las mujeres por parte de los mismos de siempre, Jorgeja y su banda", bautizándolos como "la secta fucsia". También recordaba que ya advirtió a Mosquera que no fuera a Telecinco, porque "le iban a matar". Pero no le hizo caso, queda claro.
Total, que Losantos ha sacado la artillería para defender a Mosquera, utilizando su estilo habitual, grosero y maleducado. Pero ya lo compramos así, no lo cambiaremos ahora. Eso sí, siempre nos sorprenden los adjetivos del periodista: primero le llama "tipejo", para segundos después tildarlo de "monstruo". Y más cosas: "Rocíito se ha comido a Jorge Javier. Jorge Javier murió en alguna zona intestinal de Rocíito y de Fidel. Ya habla como ellos, habla del ser, de trinkers. Está para allá". Le reproche un hecho incuestionable: "Ha estado llamando durante 8 años mala madre a la misma a la que ahora defiendes. El que se lo llamaba eras tú, tú eras el que llevabas a Antonio David". El problema es de forma, pero también de fondo: Federico es de los que no rectifica nunca, ni siquiera cuando conoce al testimonio de una víctima. Precisamente lo que le ha ocurrido a Jorge Javier Vázquez, que ha pasado a creer la versión de la Rociíto sin ninguna discusión posible. Para acabar de arreglar el circo, Losantos ataca a Carrasco: "Lleva diez años sin ver a sus hijos, ¿cómo no va a ser mala madre esta tía?".
Losantos no soporta Telecinco... pero no puede quitar la vista de la pantalla. Sabe que le da visitas y oyentes. El show es así.