Ser famoso tenía unos costes, y ahora Dulceida se está enterando de ello a marchas forzadas.

La influencer catalana -seguramente la más potente del Estado- ha visto cómo medio Twitter se lanzaba sobre ella tras haber pedido respecto a su intimidad cuándo esté de vacaciones.

En un Instastories, Dulceida ha anunciado que se marcha a Menorca, donde desea estar con tranquilidad. "Si me veis en la playa, saludarme, pero no me haré fotos (en otro momento, claro está que sí, no digo nunca que no). Pero en la playa quiero descansar e iré con unos pintas... Os amo", escribe con aparente buen rollo:

Lo que pasa es que muchos usuarios no han aceptado el mensaje conciliador de la influencer. Algunos creen que como alguien que vive de las fotos y los followers, tiene que estar siempre a punto para sus seguidores; otros directamente desprestigian su trabajo:

También están los que se ríen de las supuestos "pintas" de Dulceida en la playa, después de colgar esta foto el mismo día:

Entre tanto mensaje crítico, la misma Dulceida ha querido salir a la palestra para afirmar que "no sé qué tiene Twitter que concentra a la gente más maleducada y sin respeto":

El viaje de Dulceida a Menorca llega después de unos días románticos en la isla griega de Santorini. Y es que con su mujer y también influencer, Alba Paul, no paran:

 

En tabla|puesto shared by Aida Domenech (@dulceida) donde|dónde

Veremos si Dulceida se lo repiensa y acaba haciéndose selfies en Menorca con alguno de sus fans.