La ciudad china de Wuhan es la zona cero de la pandemia del coronavirus. Después de meses de confinamiento total, empiezan a levantarse las medidas restrictivas, aunque la desconfianza flota en el ambiente. No las tienen todas consigo, y no es de extrañar. Sus 11 millones de habitantes no podrán salir de la ciudad hasta el próximo 8 de abril, aunque sí se permite la llegada de algunas personas, como el equipo de TV3 establecido en China, con el corresponsal Francesc Canals al frente. El catalán se ha desplazado desde Pekín a la capital de la provincia de Hubei para informar in situ de cómo se está viviendo este momento histórico. La llegada estremece.

Francesc Canals Wuhan 2@francesc canales

Francesc Canals Wuhan @francesc_canals

Canals comparte el vídeo de la entrada en el hotel donde establecerán su base durante la estancia en Wuhan, y es imposible no sentirse absolutamente impactado. El séquito de la cadena pública, cargando todo el material necesario para hacernos llegar sus crónicas, son detenidos a la puerta del establecimiento por operarios protegidos de forma extrema, y que proceden a desinfectarlos con pistolas de dispersión de soluciones contra el coronavirus. La secuencia, que parece extraída de un guion cinematográfico de ciencia-ficción, pone los pelos los de punta: por Francesc y sus colaboradores, pero también por la realidad que están viviendo en la región.

Frances Canals TV3 @francesc canales

Francesc Canals TV3 @francesc_canals

Francesc Canals Wuhan @francesc canales

@francesc_canals

Como decíamos hace unos días viendo las medidas de protección (mucho más suaves, la verdad) que se han impuesto en las instalaciones de TV3, nunca nos acostumbraremos a ver este tipo de imágenes apocalípticas. Fuerza y mucha salud, compañeros.