Por fin, buenas noticias sobre Amaia Montero. La fundadora y exmiembro de 'La Oreja de Van Gogh' es sinónimo, desde hace muchos años, de drama, de polémicas, de problemas. Desde que se separara de la banda todo ha ido a peor. Su salud mental se ha visto afectada, y el trabajo para remontar está siendo agotador. A veces, incluso, parecía que inocuo: no avanzaba. A eso tenemos que añadir otros episodios relacionados con la salud, despertando alarmas entre sus seguidores. Hace bien poco nos enterábamos que estaba ingresada enla UCI, pasó 10 días en una situación comprometida. El motivo, una lesión en un dedo de la mano que se complicó bastante. Todo le sale mal, pobre. Afortunadamente está dejando atrás el mal trago.
Tras ser intervenida en el hospital Beata María Ana de Madrid, y de unas cuantas semanas de silencio a su alrededor, tenemos reaparición de Montero. Y podemos celebrar que la persona que vemos en Instagram despierta optimismo. Se la ve radiante, en un buen estado de salud, y en una forma excelente. Ha vuelto aquella Amaia que todos conocíamos, se han acabado los altibajos. La artista se muestra así al lado de su hermana Idoia, se idolatran. Y se nota. Son las "sisters". Incluso se lo dicen con música: "Mi persona favorita" de Alejandro Sanz y Camila Cabello.
Amaia Montero reaparece después de meses de inquietud y angustia
Con esta imagen finaliza, de momento, la inquietud por saber de la cantante. Una preocupación que se explica con imágenes de aspecto dejado como las que colgaba hace meses. Tampoco ayudaban mucho las frases que elegía: "Si la esperanza es lo último que muere y todavía no la he perdido, ¿de qué me sirve la vida?" Ingresó en la Clínica Universitaria de Navarra para tratarse de un fuerte episodio de estrés y ansiedad, volviendo a evaporarse hasta que en pleno apagón informativo, su ex Gonzalo Miró era el encargado de decir que "está mucho mejor, pronto volverá a los escenarios". Sin embargo, la siguiente noticia fue la de su hospitalización, dejando a todo el mundo boquiabierto y angustiado. Una montaña rusa.
La cantante esconde las manos, motivo por el cual pasó 10 días en la UCI
La única mancha misteriosa de la imagen de las Montero, sin embargo, es el detalle que se esconde en la fotografía. No enseña las manos. Tampoco lo hace su hermana, pero en el caso de Amaia el gesto cobra un significado especial. ¿Un capricho del objetivo o un mensaje oculto? ¿Han quedado secuelas que prefiere no mostrar? Son las preguntas que se hacen muchos fans y curiosos de la que, durante una época, fue la reina del pop en España. En todo caso, con la cara paga. Y esta cara es la de una mujer feliz.
Ojalá que no perdamos de vista a Amaia nunca más. Será una gran señal de su fortaleza.