Hay una parte buena y una parte muy buena en que la mayoría de las portavoces de los partidos en el Congreso sean mujeres. La parte mejor es que salen a la luz machistas, ultras, fachas y viscosos a valorarlas por su físico. Cayetana Álvarez de Toledo, Inés Arrimadas, Laura Borràs y también la del PSOE Adriana Lastra. De esta última habla Alfonso Ussía, la momia sin trabajo, ahora que La Razón lo ha echado por demasiado ultra incluso para Marhuenda. 

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adriana lastra EFE

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"La choni de los muslos desmesurados es una delincuente". Ussía tiene 72 años pero como si tuviera 102. Sale del sarcófago para valorar al físico... ¡de los otros! Como Nosferatu, a quién se parece, Ussía no se refleja en los espejos, pero los demás ven que es un ser repugnante. Tanto como sus tuits y sus followers:

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Claro que hay quien sigue Ussía por placer no de leerlo sino de insultarlo:

Algunos tuiteros consideran que tras cualquier machista hay gotas de misoginia, autoodio, complejo de inferioridad y homosexualidad reprimida. ¿Ussía es gay? Haría un tuit contra sí mismo.