La hija/nieta de Ana Obregón sigue siendo la noticia del año en el mundo rosa. Ninguna otra ha abierto diarios de información general y ha abierto la polémica a cada ciudadano, obligado a plantearse si le parece bien que una actriz de 70 años haya decidido hacer engendrar a una criatura de pago con el esperma del hijo muerto para hacerle de madre y abuela durante los años buenos que le queden a Obregón, que tirando largo serán no más de 15. Cuando la pequeña Ana Sandra sea adolescente será huérfana o con una abuela muy vieja. Sin hermanos y sin padre. ¿Y el abuelo? Ana Obregón tiene la manía de que el padre del difunto, Alessandro Lequio, haga de abuelo. Este miércoles, en la presentación del libro sobre todo el drama de la muerte y la maternidad subrogada, Ana le ha dicho en directo a su ex Alessandro Lequio: "Ven a conocer a tu nieta". La cara de Lequio era un poema:

Lequio Obregón Telecinco
Lequio Obregón Telecinco

Ana Obregón a Lequio durante El programa de AR: ""Llevo un mes que no me escribes ni nada y no sé lo que te pasa y no sé si te he hecho algo. Decirte que tu nieta te está esperando en casa porque es tú familia y porque está deseando conocer a su abuelo. Anita va a recibir todo el amor mío, el de sus doce tíos que están locos con ella y el de su primos. El día que yo ya no esté, ella va a tener una familia con la que va a estar más protegida que la de Robert De Niro". Lequio no ha viajado a Miami para conocer a la niña porque está en profundo desacuerdo con su existencia. La historia que era un deseo del difunto es la excusa que se ha buscado Obregón para llenar su vida con un bebé. Si Aless dijo querer ser padre post mortem no estaba bien cuando lo dijo. En plenitud aclaró que guardaba esperma por si la quimioterapia lo dejaba estéril y poder ser padre con su novia catalana. Pero a Obregón tanto le da, necesita sobrevivir al dolor de la muerte brutal de un hijo de 27 años. Lequio se ha revuelto. Vídeo:

Lequio niega que se haya negado a hablar con su ex en el último mes: "Esto no es cierto". Y sobre que la nieta la espere: “Que mi nieta me está esperando… A mí me hace mucha gracia esto. Otra cosa es que yo quiera compartir con toda España lo que yo haga. Lo que yo haga es cosa mía y de mis amigos, yo con ellos comparto todo lo que yo hago, pero con España no tengo por qué hacerlo. Creo que es comprensible”.Se entiende que no tiene ningún problema con la niña, que no tiene culpa de nada. Claro que irá a verla. Lo más probable es que en un futuro quien se tenga que encargar de la criatura sea la más joven de todos, la mujer de Lequio María Palacios. y la hermana de la pequeña sea la hija pequeña de Lequio, Ginevra.

Alessandro Lequio Maria Palacios mobil Gtres
Alessandro Lequio y Maria Palacios, GTRES

Y la clave de todo lo que se esconde tras esta maternidad polémica: "He leído que ataco a Ana, mi crítica es a quien dice que esta es una historia preciosa. Esta no es una historia preciosa. Es una historia de terror. Del peor de los terrores. Ya está". Uf. durísimo y explota el grano de pus que Obregón esconde. Lequio ya no calla más. Lo que hay tras la pequeña Ana Sandra no es una historia de amor sino de miedo. El miedo de Ana Obregón de envejecer sola. O de no querer vivir más y suicidarse, como confiesa en el libro que quiso hacer. El difunto no quería hijos post mortem sin padre ni madre y con una abuela de 90 años por una sencilla razón: porque nadie quiere eso para sus hijos no natos. Alessandro Lequio lo sabe, conocía a su hijo y ahora calla para no estigmatizar a una niña que no tiene la culpa. Pero deja claro que de precioso nada. Es terrorífico.