TV3 está llena de estrellas del audiovisual. Cada vez que vemos una cara nueva en la cadena catalana por excelencia tenemos claras dos cosas: que triunfará y que entrará en el panorama de celebridades catalanas. Cuando un protagonista se mantiene en la élite de audiencias de Catalunya, su figura entra dentro de la lista de caras más míticas del panorama y los espectadores están encantados. Realmente, la mayoría de programas de TV3 son excelentes y, sin duda, uno de los más míticos de Catalunya tiene el nombre de un país: Polonia. El programa que imita y bromea de absolutamente todo es uno de los favoritos de la audiencia y, en gran parte, es gracias al gran talento que tienen todos los intérpretes. Sin duda, uno de los mejores del elenco es Ivan Labanda, que todo lo hace bien.
El actor e imitador catalán es una de las referencias del panorama, porque parece que todo lo que toque lo haga bien. Aquí mismo escuchamos cómo explicaba su anécdota cuando dobló Tintín, en el que el mismo Steven Spielberg se quedó de piedra con sus gestos. Realmente, el actor catalán parece que haya pasado por todas partes y, de hecho, estas vacaciones también ha pisado el plató de RAC1, donde ha tenido unas declaraciones que han dejado en shock a los oyentes. Ni más, ni menos, después de una pregunta sin ninguna intención sobre si es buen motorista, el protagonista ha revelado una historia que le pasó hace años al lado de otra actriz catalana fantástica: Elena Gadel.
Atentos a las palabras: "Ir por Barcelona, ahora mismo no, pero normalmente es bastante como jugar al Mario Kart. Yo, en realidad, me entreno para conducir por Barcelona jugando a Mario Kart... Yo creo que conduzco muy bien... Una vez tuve un accidente con Elena Gadel, pero esto fue en 2018. Un coche que se saltó un semáforo en rojo. No fue culpa mía... Teníamos que ir a hacer la función de Cabaret y no llegamos al teatro. A ver, es que fue muy fuerte. Quiero decir, salí disparado dando vueltas por encima del coche... Parecía un doble de acción". Además, no os lo perdáis, porque la cosa empeora conociendo la situación en que se encontraba Elena Gadel, estaba embarazada: "Fue muy heavy porque yo era la única persona que sabía que Elena estaba embarazada en aquel momento...".
El panorama era preocupante y el actor sigue explicando: "Me morí directamente... Y Elena, tirada, pobre, allí en el medio... Estaba de poco... Quizás no lo tendría que estar explicando todo esto... Sí, no, no, después todo bien, todo bien. Todo correcto, todo bien, todos bien... ¡Soy buen motorista!". Ni que lo jure, el protagonista lo sabe hacer bien todo. La historia hace poner el corazón en un puño, pero, por suerte, todo quedó en un susto.