Eufòria es un gran éxito y precisamente por eso recibe tantas bofetadas. Existen muchos otros programas de TV3 que son criticados pero este, al ser la joya de la Corona de la cadena, por largo, en directo y estilo telecinquero, tiene más números para ser zurrado. Va con el sueldo. Este año está sufriendo la maldición del tercer año. Como cuándo Operación triunfo 3 en TVE pasó desapercibida con un ganador poco recordado (Vicente) o como cuándo en Telecinco se cargaron el invento y pusieron a Pilar Rubio de presentadora y tuvieron que cerrar el concurso precipitadamente pocas galas después de empezar. Eufòria sigue siendo el programa más visto de los viernes pero empieza a sufrir. La culpa es hacer 3 años seguidos de programa sin respiro, y claro, pierde calidad. Los cantantes parece que o no tienen nivel, Nina dixit, o son los que no quiso OT, Mainat dixit. El jurado se queda corto, ya no queda ninguno de los tres iniciales, añorados Marc Clotet, Elena Gadel y Lildami y ahora se han ingeniado una manera de alargar el chiclé, un programa posterior a la gala, La Postgala d'Eufòria. Ha recibido una crítica dura y esta hace daño porque no viene de fuera sino de dentro de la misma TV3 y por parte de un periodista que es espectador tipo de Eufòia, el reportero estrella del TN Abraham Orriols:
Abraham Orriols escribía sobre la una y media de la madrugada al acabar la postgala: "Sabe mal pero qué vergüenza enajena la postgala de Eufòria" y añade el hastag oficial del programa porque quiere compartir su opinión, tan respetable como cualquier otra, con todos los seguidores y los autores del programa. Esta mañana el periodista se ha arrepentido y ha borrado el tuit, consciente de que no es una opinión neutra ni por lo que dice ni por quien lo dice. Pero quedan los que han añadido opinión a la suya . Abraham Orriols como el flautista de Hamelin.
No hay manera. Pongan a quien|quién pongan es esperpéntico. Hay alguien allí dentro con mucho de poder que tiene un criterio pésimo.
— brotbord (@brotbord) March 16, 2024
Todo el programa da vergüenza. Nunca lo he podido mirar porque es insoportable. Pero veo que se va viendo...
— Benfart (@Benfart3) March 16, 2024
La postgala coge la costumbre de Telecinco de hacer un programa posterior al reality o talent-show de turno, más rompedora y que a menudo mea fuera de tiesto. Ya pasó con un programa que se llamaba Fora de carta que iba después de Joc de cartes y acabó cancelado. No es el tono TV3. Ahora con Eufòria vuelve a suceder, lo presentan Nadine Romero y Malbert, un tuitero que se define en redes en perfecto castellano: "Especialista en sacar de quicio. Intenso y porculero". Un vistazo a los comentarios de los dos presentadores puede hacer entender por qué Abraham Orriols, el yerno de Catalunya, pasó vergüenza ajena- La presentadora amenaza con "levantarse la camiseta y enseñar los pechos" y el tal Malbert hizo el ridículo mofándose de la grandiosa y difunta Núria Feliu: "La semana pasada le di un beso a una tal Núria no sé qué y le envié un beso y claro, no le ha llegado, hahaha". Este es el nivel. Difícilmente volverá la semana que viene el tal Malbert no sé qué.
TV3 no es twitter. Orriols se queda corto con el concepto vergüenza ajena, pero alguien le ha hecho borrar el tuit. O él mismo con uno "Ya se lo harán". La nueva TV3 que quiere atraer gente joven quizás está provocando el efecto contrario: aleja jóvenes y grandes. Un programa blanco estropeado por malos presentadores. Acostumbra a pasar cuando para escoger un conductor de programas en lugar de castings se miran los followers. Ahora puede ser presentador de TV3 cualquiera indocumentado.