Abrir un bar en España sigue siendo el sueño de muchos, pero para Abraham Galera, camarero de profesión y creador de contenido viral, esa idea no es más que una trampa mortal. En una entrevista explosiva para el pódcast ‘Rompiendo esquemas’, soltó sin rodeos: “Un consejo que le daría a alguien que quiere abrir un bar es que no lo abra”. Una frase que, lejos de ser exageración, refleja la crudeza de un sector devorado por los impuestos, la falta de empatía de algunos clientes y la precariedad del modelo hostelero.

Su advertencia no es gratuita: lleva años detrás de la barra, entre bandejas rebosantes y clientes impacientes, pero también en el escaparate digital, donde acumula millones de reproducciones mostrando la otra cara del oficio. Y lo que narra no es precisamente un cuento de éxito fácil, sino un manual de supervivencia para quienes creen que abrir un bar es el camino directo a la independencia económica.

Abraham Galera
Abraham Galera

La hostelería en crisis: lo que no te cuentan antes de abrir un bar

En su charla en “Rompiendo esquemas”, Abraham explicó con dureza las trabas que enfrenta cualquier emprendedor en la hostelería: cuotas de autónomos desorbitadas, pagos a la Seguridad Social que ahogan a los pequeños empresarios y un sinfín de gastos invisibles que convierten la rentabilidad en una utopía. “Hoy mismo he pagado 7.000 euros de Seguridad Social por ocho trabajadores”, relató, subrayando la frustración de ver cómo gran parte de las ganancias desaparecen en obligaciones fiscales.

A esto se suma la dureza del día a día: jornadas interminables, clientes que creen que por pagar tienen derecho a exigir lo imposible y una competencia feroz que deja en claro que solo los más resistentes sobreviven. Abrir un bar en España no solo exige inversión económica, sino un aguante psicológico que la mayoría subestima.

El camarero que conquistó las redes y se convirtió en voz del sector

Lo curioso es que, pese a las dificultades, Abraham Galera ha logrado convertir sus vivencias en contenido que arrasa en internet. Bajo el nombre de “Abrigaca”, comparte en TikTok e Instagram situaciones cotidianas de la hostelería que resultan tan reales como incómodas. Desde clientes que dejan montañas de cáscaras de pipas en las terrazas, hasta los absurdos de ciertos pedidos en plena hora punta, sus vídeos se han convertido en una especie de altavoz para todos los camareros hartos del mismo guion. Pero, gracias a esa naturalidad y a su humor afilado, ha acumulado más de 53 millones de likes en redes sociales. Lo que empezó como una válvula de escape se transformó en una plataforma masiva para exponer la precariedad del sector y, al mismo tiempo, educar tanto a clientes como a jefes.

 

@abrigaca Por ti lo dejo todo! #humor #viral #comedia #tiktok #parati #foryou #fyp #bar #abrigaca #camarero #mesero #mozo #meme #risa #bandeja #cliente #restaurante ♬ sonido original - ⭐️☕️@Abrigaca☕️⭐️

 

A lo largo de la entrevista, Abraham dejó claro que la hostelería no perdona. Aunque reconoce que su trabajo le da cierta satisfacción personal, insiste en que la rentabilidad es mínima: "Es muy frustrante abrir un negocio, ver que trabajas, pagas tus sueldos y, por más que trabajes, necesitarás más gente contratada y tú te llevarás al bolsillo lo mismo”, confesó.

Con frases tan contundentes como “no te dejan hacerte rico”, Abraham destapa la realidad de muchos pequeños empresarios que sienten que luchan contra un sistema diseñado para hundirles. Y aunque admite que siempre podría volver a trabajar como camarero sin problemas, no duda en desalentar a quienes sueñan con montar su propio local. Para él, el futuro está más cerca de los negocios digitales o las marcas personales que de la barra de un bar.