Los retoques estéticos forman parte de la rutina diaria de casi todas las celebridades. Muchos de los artistas que suelen ser admirados por su físico han estado expuestos a mucha presión con relación a su imagen, motivo por el cual deciden pasar por el quirófano para mejorar aquellos detalles estéticos que los hacen sentir insatisfechos con su imagen, causándoles un sinfín de inseguridades. Uno de los casos más representativos en el mundo del espectáculo es el del productor y presentador británico, Simon Cowell, quien ha reconocido en más de una ocasión su obsesión por los procedimientos de belleza facial y retoques estéticos.

Sin embargo, una serie de problemas de salud hicieron que el polémico jurado de “America's Got Talent" cambiara por completo su estilo de vida, dejando a un lado los retoques estéticos para enfocarse en su salud. No obstante, todos los años de uso indiscriminado de sustancias en su cara hizo que su proceso no fuera del todo sencillo, cambiando por completo la percepción que tenían sus fans sobre él al presentarse al natural, con una cara totalmente nueva en la premiación de los Kids’ Choice Awards 2022.

Simon Cowell (a la derecha)

Simon Cowell (a la derecha)

En una entrevista para “The Sun”, el productor británico contó con exactitud cuál había sido el momento donde decidió darle un giro de 180° a su vida, visitando a un especialista en hábitos alimenticios y pagando una gran cantidad de dinero para retirar todos los implantes y rellenos faciales que se había colocado. “Vi a un médico en Harley Street. Se especializa en cierto tipo de dieta. Hizo mi análisis de sangre, de orina y todo lo demás, y un mes después llegaron los resultados y sus palabras fueron: ‘Tienes la peor dieta de todos los pacientes que vi en mi vida: tienes la dieta de un estudiante de la década de 1960′”, señaló el jurado de 'The X Factor'.

Además de descubrir que su estado de salud se estaba deteriorando a causa de su estilo de vida, el productor también decidió detener sus tratamientos de bótox, dado que su cara no poseía ni un ápice de naturalidad, al punto de calificar su apariencia “como algo salido de una película de terror”. “Hubo una etapa en la que podría haber ido demasiado lejos. Vi una foto mía de ‘antes’ el otro día, y no me reconocí como yo mismo en primer lugar”, indicó Cowell, mientras señalaba que el punto de inflexión llegó cuando su hijo Eric, de 8 años, le hizo un llamado de atención al indicarle que ya no se veía como él mismo. “Estaba histérico. Ya fue suficiente. No hay relleno en mi cara en absoluto ahora. Cero”, declaró.

"Hubo una fase en la que todos teníamos la cara llena de esto y lo otro”, pero en realidad, para mí ahora, todo se reduce a una alimentación saludable y beber toneladas de agua", dijo el presentador, mientras hacía una reflexión sobre la toma de decisiones: "Lo único bueno de envejecer es que tienes mucha experiencia y no siempre se trata de las cosas que hiciste bien, sino también de las cosas que no hiciste".