Una de las top models más icónicas del mundo de la moda ha reaparecido tras haberse alejado del foco mediático a causa de una deformación corporal que sufrió por un tratamiento mal ejecutado de criolipólisis, una operación estética. Se trata de Linda Evangelista, la supermodelo que, junto a Cindy Crawford, Claudia Schiffer, Kate Moss, Naomi Campbell y Christy Trulington, conformaron el grupo de las ‘Big Six’ de la moda en los años 90. Después de cinco años alejada de la industria del modelaje, Evangelista sorprendió a todos sus fans al protagonizar una de las campañas de la celebración del 25° aniversario del lanzamiento del icónico bolso ‘Baguette’ de la firma Fendi.
La supermodelo decidió confiar en el famoso fotógrafo Steven Meisel, con quien ha trabajado en varias campañas a lo largo de su carrera, y con su amigo personal Kim Jones, director artístico de la marca Fendi y de Dior Homme, la división de moda de la firma. Además, Linda Evangelista también contó con la asesoría de la estilista Carlyne de Dudzeele. En este regreso a la industria, la top model apareció usando tres gorras satinadas en tonalidades pastel, mientras posaba con varios bolsos ‘baguette’ de la firma en su cuenta de Instagram.
Aunque la modelo no ha querido desvelar mucho más sobre su regreso triunfal al mundo de la moda, esta última campaña con Fendi podría convertirse en su regreso a las pasarelas, dado que el próximo 9 de septiembre la firma Fendi organizará un desfile de moda en la ciudad de Nueva York para celebrar por todo lo alto el 25° aniversario del icónico bolso ‘baguette’ de Fendi, siendo Evangelista la modelo principal de este desfile.
Linda Evangelista intenta recuperar su posición en la moda en medio de una demanda millonaria
Linda Evangelista, de 56 años, no había contemplado retirarse de las pasarelas hasta que sufrió una deformidad corporal producida por un tratamiento de congelación de grasa que la dejó “permanentemente desfigurada”. Por ese motivo, la modelo presentó una demanda en contra de ‘CoolSculpting’ y su empresa matriz, ‘Zeltiq Aesthetics Inc’, por 50 millones de dólares por daños y perjuicios. En la demanda, Evangelista afirma que tuvo que retirarse de su trabajo como modelo desde que se realizó siete sesiones de este tratamiento estético entre agosto de 2015 y febrero de 2016.
En una conversación con ‘People’, Evangelista contó que empezó a notar algunos bultos irregulares en la barbilla, debajo del pecho y en los muslos tres meses después de haber iniciado este procedimiento. Asimismo, aseguró que las zonas que debían reducirse se endurecieron y después de un tiempo perdió totalmente la sensibilidad en aquellas zonas de su cuerpo.
La modelo confesó que los resultados fallidos de este tratamiento le han causado daños físicos y psicológicos. “Llegué a no comer nada. Creí que estaba perdiendo la cabeza (…) No solo ha destruido mi modo de vida, sino que me ha hecho caer en un ciclo de profunda depresión, tristeza y el más profundo autodesprecio”, indicó la modelo en la entrevista.