Hacienda somos todos, o eso dicen. Los que no se libran de pagar son los famosos. Algunos de ellos figuran en la lista que la Agencia Tributaria publica todos los años con los nombres de aquellas personas que deben cantidades superiores al millón de euros. En ella encontramos en el número uno a Paz Vega, con un total de 3.029.398 euros. Le sigue el escritor y periodista César Vidal Manzanares con 2,6 millones de euros o Patricia Conde con 1.041.495 euros. Fuera del millón como deudores aparecen Kiko Matamoros con 713.759,21 euros o Sergi Arola con 985.156 euros.
Precisamente, el chef es el que más ha disminuido su deuda en estos últimos años porque su situación económica ha mejorado bastante tras el cierre de sus restaurantes. La televisión ha sido su salvación. Sergi Arola sigue los pasos de otros compañeros de profesión como Jordi Cruz. Con sus participaciones en programas de televisión y anuncios pagan sus restaurantes, y en el caso de Arola, su deuda.
Desde bien pequeño el catalán se enamoró de la cocina. Fue discípulo de Ferran Adrià en los fogones. Llegó a convertirse en uno de los mejores chefs de España. Reunió varias estrellas Michelin y soles Repsol. Sin embargo, su carrera ha dado un vuelco de 180 grados. Acabó en la ruina. Pero de chef ha pasado a personaje de televisión, tal y como figura en Google.
Sergi Arola triunfa en Chile como un personaje de televisión
Sergi Arola ha cruzado el charco junto a su mujer y parece que ahí se va a quedar porque ha encontrado su sitio. No solo triunfa como jurado estrella de ‘MasterChef’ Chile, donde se muestra implacable, sino que además ha abierto varios negocios. El Lola by Arola en Santiago de Chile, el Orfebre del hotel JW Marriott de Monterrey, en México. "Mi papel en este proyecto es el de director gastronómico, que es coordinar los espacios del hotel, desde los desayunos, hasta banquetes, room service, catering, y por supuesto Orfebre, que es el que nutre o genera las sinergias gastronómicas con el resto de las ofertas gastronómicas de JW Marriott", comentó al poco de conocerse su fichaje. También trabaja en el LAB en Peña Longa Resort, que ha recibido este año una estrella Michelín.
También presentó El discípulo del chef y Parrilleros Space: Los fuegos se encienden. Su suerte cambió en 2017. En Chile su nombre es sinónimo de éxito, mientras que en España era de fracaso. Además, le perseguía la alargada sombra de Hacienda. Con las ganancias de sus trabajos en Chile, poco a poco, el catalán está saldando su deuda.