Ana Pastor es uno de los rostros más conocidos de La Sexta. Empezó a adquirir una gran fuerza cuando su marido, Antonio Ferreras cogió parte del control y le dio un aire totalmente informativo. Mientras éste se encargaba del exitoso programa de actualidad, especialmente política, ‘Al rojo vivo’, su mujer cubría algunos acontecimientos. No obstante, adquirió un peso más importante y llegó a tener programa propio, ‘El Objetivo’. Estos últimos años también la hemos visto en espacios como ‘Dónde estabas entonces’, repasando las últimas décadas a partir de los acontecimientos más importantes.
Ana Pastor también cuenta con su propia empresa, donde controla que todas las noticias sean veraces y contrastadas. Nació con la intención de acabar con las conocidas ‘fake news’. Se llama Newtral. Es todo un éxito. Sin embargo, su faceta televisiva está perdiendo fuerza, tal y como nos cuenta el medio 'Elcierredigital'.
Ana Pastor y Ferreras/ Agencia
La periodista ha anotado los peores datos de temporada de sus espacios. Todos por debajo de la media de la cadena. Parece que ya no interesa al público. Esto podría dañar a su empresa con la que gestiona todo. La Sexta sigue siendo la tercera privada más vista mes a mes. No tiene ningún rival. Su principal competidor se encuentra por debajo con más de dos puntos de diferencia. La Sexta lidera con un 6,3%.
Parece que la política empieza a aburrir a los espectadores, ya que si nos fijamos en las audiencias de toda la programación, el espacio líder, y muy por encima del de Ferreras, es Aruseros, el divertido matinal de Alfons Arús. Sin embargo, ‘El Objetivo’ de Pastor está tocado y hundido, sus entrevistas son pobres y ya no interesan a nadie. Muy repetitivas. Obsoletas.
Alfons Arús/ La Sexta
Ana Pastor lleva cuatro años de éxito con su productora Newtral, con la que ahora lleva sus programas. Newtral nació en 2017, con el objeto social de "la producción de vídeos, televisión, imágenes, sonidos e información en la red y social media”. La empresa funcionó desde sus inicios. En 2018 logró unos beneficios de más de 850.000 euros que cayeron en 2019 hasta los 230.000 a pesar de elevar sus ingresos (de los 3,8 millones de euros de 2018 a los 4,3 de 2019).