Es la REINA DE INSTAGRAM, en mayúsculas. Todos quieren ser como ella. Cuando menos, todos quieren saber cómo es ella. Más de 5 millones de personas están pendientes de lo que hace, de lo que dice, y sobre todo, de lo que publica, muy por encima de otras influencers como Dulceida, Cristina Pedroche o Laura Escanes. Úrsula Corberó sabe que su vida interesa y juega con esta ventaja a la hora de hacerse una foto y colgarla.
Por eso, si a la expectación le sumamos una peluca rubia platino, una ducha y la insinuación de un cuerpo desnudo, ya tendremos el menú perfecto para batir todos los récords de likes que pueda tener una foto de algún instagramer en este país. En sólo media hora ya tenía casi 100.000 visitas y en pocas horas llega casi a las 800.000. La 'actriz con nombre de bruja, pulpo y fea', tal y como ella se describe, quizás tiene nombre de bruja, pero cara de ángel y talento a raudales. Cuando interpreta algún papel o cuando piensa los montajes de sus fotos de Instagram. Cuida el mínimo detalle y en esta ocasión, la imagen tiene una plasticidad e intención que han aplaudido sus seguidores. Incluso, la palabra 'cu-cu' que ha acompañado con el emoticono de una paloma blanca.
La 'paloma de la paz' simboliza el pájaro que regresó al arca de Noé para avisar que el diluvio había terminado. El diluvio sí, pero las visitas a la foto no han hecho más que comenzar.