Pocas actrices hay más queridas que ella. Lisa y llanamente, Sílvia Abril es maravillosa, tiene sentido del humor, tiene talento, hace reír siempre que sale en pantalla y lo más importante de todo: todos los que la conocen, absolutamente todos, (empezando por su pareja, Andreu Buenafuente, y su hija, Joana, y acabando por todos los colegas y compañeros de profesión que ha ido haciendo a lo largo de su carrera), destacan de ella su bondad. Como dirían algunos, es un ser de luz, una persona que hace más feliz la vida a la gente que tiene al lado, alguien a quien, con razón, todo el mundo ama con locura, la conozcan o no hayan tenido el placer. Una Sílvia a quien podremos volver a ver en noviembre haciendo El Tenoriu en el Teatre Coliseum de Barcelona.
Sílvia lleva muchos años forjándose una carrera delante de cámaras que es de traca. Pocas actrices dedicadas a eso tan difícil que es hacer humor, pueden lucir orgullosas el currículum que ella tiene. La hemos visto en todas partes. En series (Divinos, La familia Mata, La que se avecina, 39+1, Señor dame paciencia, Todas las veces que nos enamoramos...), en películas (Padre no hay más que uno 1-2-3-4-5, Superagente Makey, Bajo el mismo techo, El mejor verano de mi vida, Cuerpo de élite, Anacleto: agente secreto, Torrente 3-4-5, Tres bodas de más, Spanish movie...) y en miles de programas de entretenimiento y de humor, haciendo de ella misma y haciendo partirnos de risa al personal, tanto presentando, como colaborando, como concursando (Caiga quien caiga, Premios Goya, ¡Ahora caigo!, Homo Zapping, Buenafuente, Polònia, El Hormiguero, Me resbala, El pueblo más divertido, Late Motiv, Tu cara me suena, Masterchef Celebrity, LOL: si te ríes, pierdes...).
En su vida privada, el buen humor y las carcajadas constantes que provoca en los espectadores o en sus compañeros de programa, los provoca también en la gente a la que más quiere: su familia y sus amigos. La intérprete es una persona a la cual cuesta imaginarse sin su sonrisa, optimista por naturaleza, y que siempre regala a la gente que se encuentra con ella. Y este pasado fin de semana, los que han tenido la suerte de ver in situ esta alegría, los que han tenido la suerte de pasar 48 horas con su hilarante compañía, han sido un grupo de amigos con los que se ha ido de fin de semana a una casa rural preciosa, el 'Mas d'en Mas', en L'Ampolla, en la comarca del Baix Ebre, en tierras tarraconenses.
Sílvia, y muchos amigos y amigas que aparecen en unas imágenes llenas de buen humor, amor y buena compañía, pero también, llenas de relax, de il dolce far niente, de chapuzones en piscina y de comidas y conversaciones en torno a una mesa, ha vivido un fin de semana donde han desconectado, y donde ella misma ha confesado, con un análisis detallado, todo lo que ha hecho estas últimas 48 horas: "Fin de semana de risas, bebercio, comer, comer, comer, salseoh, comer, comer, comer, más risas, caminar, charlar, jugar, echar de menos, caminar, delta, delta, delta, volver a beber y comer, mearse de risa, bailar y todo casi sin salir del 'Mas d'en Mas. Gracias montse!!! Volveremos!!!!". En resumen, que han comido y entre comida y comida, han hecho otras cosas.
Sílvia Abril, maravillosa.