Que tu pareja sea investida como presidente de los Estados Unidos no pasa cada día. De hecho, Donald Trump ha sido el 45º de la historia en acceder al cargo, entre millones y millones de norteamericanos. Esto tendría que ser a priori un motivo de alegría, pero no en el caso de su mujer Melania.

¿Eran nervios, un disgusto inesperado o es que la primera dama yankee está disgustada con su nuevo cargo? Melania todavía no se ha pronunciado al respecto, pero su cara de tristeza ha comportado comentarios (y memes) de todo tipo en las redes.

En un momento de la ceremonia, el nuevo presidente se gira dedicando una sonrisa a su mujer. Ella pasa de lucir un gesto serio, a contestarle también con una tierna sonrisa, que en cuestión de segundos se vuelve a convertir progresivamente en un rostro pálido. Y no se puede decir que sea una cara neutra, sino triste:

Dicen que las comparaciones son odiosas, y algunos no han perdido ni un segundo en meter el dedo en la llaga. ¿Qué mejor, para los anti-Trump, que comparar las evidentes muestras de amor entre Obama y su mujer, con las de los nuevos pobladores de la Casa Blanca?

A pesar de todo, líos de pareja aparte, Trump tuvo otras preocupaciones durante la ceremonia de investidura... por ejemplo, arreglarse el pelo:

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Sea como fuere, cierto es que Melania Trump no lo tiene fácil para cumplir como primera dama después de la mediática Michelle Obama... Pero siempre quedará Ivanka, la hija del nuevo presidente.