"Actor, director, articulista y autor teatral. ¡Gerundense del mundo! Defensor de las libertades"!. Así se define en su perfil de Twitter un excelente actor catalán con una pila de años a la espalda trabajando encima de los escenarios, ante cámaras... e incluso, en el comedor de su casa: Martí Peraferrer. Al intérprete llevamos mucho tiempo viéndolo con papeles en series como la añorada Sitges, pero sobre todo, en El cor de la ciutat en TV3 donde hizo uno de los papeles más queridos por los espectadores y de los que se guarda un mejor recuerdo. Él hacía de Josep Llorens, más conocido como 'Sáhara', hermano pequeño de Tomàs, el personaje que interpretaba Lluís Soler y que dejó en shock a los espectadores cuando se supo que él era el violador de la serie.

En el 2021, por los estragos de la pandemia, hizo una petición pública pidiendo nada más que trabajo, pidiendo poder seguir haciendo lo que más le gusta, aquello que lleva toda la vida haciendo de maravilla, actuar. Una petición sincera y sobrecogedora: "Necesito trabajar y pagar facturas. ¿Me ayudáis?". Y la manera que se pensó para conseguirlo era, no solo muy noble, sino muy original. Emplazó a todo el mundo a verlo en su casa, en el barrio viejo de Girona, y disfrutar de teatro del bueno, y a un palmo de la cara: "¡Momentos difíciles para la gente de la cultura! ¡Solo sé hacer teatro! ¡Os invito a mi casa (barrio viejo Gi) × pasar un buen rato con una buena obra de teatro! Solo 5 espectadores.Taquilla inversa"!. Teatro en el comedor con La vida secreta de Tenesse Williams. Teatro en casa, en una butaca privilegiada, justo ante el artista.


El bueno de Martí lleva la interpretación en la sangre, y todo lo que rodea esta maravillosa profesión de actor, teatral en este caso. Una de sus declaraciones de intenciones publicadas recientemente en redes era esta: "Yo siempre he intentado producir, dirigir e interpretar espectáculos teatrales para trabajar con humildad, dignidad y asiduidad. Creo en el oficio cotidiano del teatro". Cree en el oficio del teatro y cree en el derecho a ofrecer sus servicios como actor y director teatral. Solo faltaría. Cree en su derecho, como cualquiera, a pedir trabajo ofreciendo lo que sabe hacer (y muy bien). Cree en la empatía de las personas a la hora de ponerse en la piel de los otros y permitir que alguien apasionado por este arte, pueda seguir ejerciendo encima de un escenario... Él cree. Pero hay algunos personajillos, por decirlo suavemente, que no solo no creen en ello, sino que además, demuestran tener la sensibilidad, el respeto y la humanidad en el culo.

Porque el actor acaba de vivir una experiencia absolutamente lamentable. Acaba de ser testigo de un trato abyecto, miserable e impresentable cuando ha llamado ofreciéndose a una programadora teatral. Porque... ¿qué tipo de llamadas creen que esta programadora recibe en su teléfono? ¿Llamadas de Telepizza? ¿Llamadas anunciándole una herencia de un familiar que acaba de morir? ¿Llamadas de una empresa de telefonía móvil ofreciéndole sus servicios? Llamadas de su tía de Samarruga de la Punta diciéndole que tiene un callo?... ¿O llamadas de actores, actrices, directores y directoras teatrales, ofreciendo su trabajo por si lo pueden programar en algún teatro, tal y como su nombre, su puñetero nombre, PROGRAMADORA TEATRAL, indica??? Pues la persona que le ha cogido el teléfono, o se ha encontrado el carné de programadora en el suelo o directamente, es una impresentable. Atención: "Me acaba de pasar. Finalmente se ha puesto al teléfono una programadora teatral para decir: 'Deja de llamar. Tengo tu e-mail. No puedo perder el tiempo escuchando a todos los actores que tenéis una obra de teatro para vender'"... Hay que ser muy, pero muy miserable. Con razón Martí ha acabado reconociendo que "Después de 35 años de oficio es la 1ª vez que lloro de rabia"!. Lo entendemos perfectamente.
Me acaba de pasar. Finalmente se ha puesto en el teléfono una programadora teatral para decir: "deja de llamar. Tengo tu e-mail. No puedo perder el tiempo escuchando a todos los actores que tenéis una obra de teatro para|por vender". Despres de 35 años de oficio es el 1.º. ¡vez que lloro de rabia! pic.twitter.com/P9mCHHbKsP
— Martí Peraferrer Vayreda ���� (@MPeraferrer) March 3, 2023
Solidaridad, Martí. ¡Qué oficio tan guapo el de programador y a menudo qué poco honor que hacen!
— Josep Julien (@josepjulien) March 3, 2023
Gracias @josepjulien .he hecho de programador de festival internacional de teatro y nunca he dejado un e-mail por agraïr ni una llamada para|por escuchar...costa tan poco tener empatía con los que se lo currer!!! Pero no podrán con los gatos viejos!!! 😉😘
— Martí Peraferrer Vayreda ���� (@MPeraferrer) March 3, 2023
������������ todo vuelve querido @MPeraferrer y nosotros a seguir con la lucha. Reírme al final, ya verás ������������
— Idea Asociación Cultural (@idea_gc) March 3, 2023
¿Si no puede escuchar a los actores que tienen una obra de teatro para|por vender, a quien escucha? ¿En|A los amiguets? ¿A los críticos? ¿Al partido?
— Enric Serra Amat (@serraamat) March 3, 2023
¿y entonces en q caray "pierde" el tiempo? 🤨
— Montserrat.S.Cairol (@Kanigo64) March 3, 2023
Toda la solidaridad del mundo. Esperamos que muy pronto reciba una respuesta a la altura, digna, educada, competente y sobre todo, humana.