Carlos Cuevas es de aquellos actores tocados por una varita que no sólo emocionan por lo que hacen encima de los escenarios o delante de una cámara, sino porque cuentan además, con una sensibilidad especial. Cuando sonríe, desarma. Básicamente, porque tras la sonrisa se puede observar la bondad de aquí a Lima.

carlos cuevas somriu

@carloscuevas

carlos cuevas2

@carloscuevas

El actor catalán de Merlín, sapere aude se desnuda emocionalmente cada vez que interpreta un papel o cuando expone lo que le pasa por dentro en las redes sociales y a las entrevistas. Emocionó a sus seguidores cuándo reveló que afortunadamente, su abuela, contagiada de coronavirus, había podido superar la enfermedad. En plena pandemia, fue de las voces más críticas contra las soflamas bélicas y los patriotismos sobrevenidos sobre combatir el coronavirus como si estuviéramos en la guerra: "¿Y qué pensamos del discurso bélico que rodea las enfermedades? Ganar, atacar, derrotar, vencer, aniquilar. ¿Y si sustituyéramos la épica y la barbarie por el cuidado y la paciencia? Pasémoslas, llorémoslas, acompañémoslas, cuidémoslas, tratémoslas".

carlos cuevas3

@carloscuevas

Estas palabras ya demuestran que él prefiere hacer el amor que hacer la guerra. Que prefiere los abrazos y los besos a las armas. Que para él, una sonrisa, un gesto de calor o una caricia son lo que la gente necesita. Y ahora lo ha podido demostrar con alguien muy querido. La imagen más tierna que se le recuerda ha hecho conmover a los millares de fans que tiene en las redes. Una foto donde se lo ve cogiendo en brazos a un pequeño bebé, hijo de alguien muy querido, y donde paga con la cara. El rostro de la felicidad. Un Carlos Cuevas deshecho de amor que acompaña la foto con la letra de una canción infantil: "Cinc pometes té el pomer".

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

cinc pometes té el pomer 🍎 #Emma

A post shared by Carlos Cuevas (@carloscuevas) on

La red llora de emoción:

El día que Cuevas sea padre y abrace a su propio hijo, que se prepare.... La red puede colapsar de amor.