Belén Esteban ha vuelto al punto de mira, y lo ha hecho por un tema que fue muy recurrente hace unos años. Se trata de María José Campanario, la mujer de su exmarido y padre de Andreíta Jesulín de Ubrique.

La cuestión es una supuesta llamada entre Esteban y Campanario después del ingreso de la segunda, que sufre fibromialgia. El hecho es sorprendente por la conocidísima enemistad entre las dos.

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Campanario y Ubrique. Telecinco

Esteban explicó a Telecinco el contenido de la presunta llamada, y con esta se ha ganado numerosas críticas en las redes e incluso entre sus compañeros, que consideran que no fue la actitud adecuada.

Ahora Campanario ha hablado en exclusiva a la revista ¡Hola!, donde ha asegurado que no hubo llamada. "Recuerdo absolutamente todo. De hecho, he tenido en todo momento el teléfono de manera supervisada, al igual que el resto de los pacientes, y hubo un momento en que desconecté más porque necesitaba descansar", afirma la dentista para justificar la no llamada.

A pesar de todo, parece que no está enfadada con Belén. O como mínimo, no es con quien más lo está, y es que ha dicho que demandará a algunos por lo que se ha dicho de su enfermedad, pero no a La princesa del pueblo.

"No consentiré que se dé una imagen que no es real de lo que me está pasando. No permitiré que nadie haga o diga algo que me pueda perjudicar a la profesión. Me costó mucho sacar mi carrera y encontrar una posición dentro de la odontología", asegura.

Entre los que quiere llevar al juez -que no concreta quiénes son- no se encuentra, por ahora, Belén Esteban.