A pesar de estar acostumbrado a las multitudes, seguro que el Papa Francisco no se esperaba lo que le iba a pasar después de su audiencia habitual.

Un ayudante suyo ha cogido a una niña para que lo pudiera saludar y mientras el pontífice le daba un beso, ha pasado eso:

Al "robarle" el solideo, la niña de 3 años ha despertado las risas de todos aquellos que han presenciado la escena, incluido el del Papa Francisco, que se ha tomado la situación con mucho humor.

El vídeo lo ha grabado el usuario de Twitter Mountain Butrac y la niña es su ahijada, con quien está compartiendo unos días en Roma. "Un instante antes estaba una poco nerviosa, después le ha robado el sombrero. Ha sido divertido", ha dicho el orgulloso padrino a CNN.

Nunca se sabe que puede hacer una niña de tres años sin la supervisión de sus padres, y este divertido caso, es un ejemplo de ello.