La familia Borbón volvió a reencontrarse al completo, a excepción de los nietos, en la misa homenaje a Constantino de Grecia celebrada en Windsor. Una prueba de que Letizia ha perdido poder en la corona con la campaña de desprestigio que se ha iniciado contra ella es la soledad con la que se quedó a la salida de la capilla. Por primera vez en cuatro años, Felipe salió de la iglesia del brazo de Juan Carlos sin ningún tipo de problema a que las cámaras le captasen juntos, de hecho, esa era la intención. Derrocharon una gran complicidad y cariño y se dieron un cálido abrazo de despedida. Unas imágenes que no serían del agrado de la reina. El emérito cada vez está más cerca de España, y tiene una explicación lógica.

Felip Joan Carles funeral Cisntantí GTRES
Felip Joan Carles funeral Cisntantí GTRES

Para los reyes, las polémicas de Juan Carlos solo estaban entorpeciendo su reinado. Todos los años se veía envuelto en alguna polémica, así que decidieron alejarlo de España. En agosto de 2020 se exilió en Abu Dabi, una deshonra para un exmonarca, pero no le quedó más remedio. El primer año no se supo nada de él, pero a mediados de 2021, regresó a España en alguna ocasión. En 2023 lo ha hecho hasta en siete ocasiones, y sin pedir permiso a Felipe ni a Letizia. Su hijo quiere aparentar normalidad con las apariciones de su padre.

Juan Carlos, más cerca de España para su final 

Felipe VI está muy preocupado y se arrepiente de haber enviado a Juan Carlos a Abu Dabi, tan lejos de su familia. A sus 86 años está muy delicado de salud, principalmente por su edad y los problemas de salud que arrastra desde hace muchos años. Las infantas Elena y Cristina, que no se separan de él en ningún momento, ya han dado la voz de alarma. Piden a su hermano que levante el veto al emérito. Si muriese fuera de España sería una deshonra para la familia y para su reinado, un escándalo. Además, necesita atención médica las 24 horas. Como dijo Jaime Peñafiel en su última entrevista, Juan Carlos podría morir en cualquier momento debido a su edad y sus complicaciones de salud.

El rey ya ha iniciado los movimientos pertinentes para que su padre esté cada vez más cerca. Es muy probable que nunca más pise Zarzuela, ni viva en Madrid en un hotel o en el piso de la infanta Elena, la ubicación ideal sería Sanxenxo, en Galicia, donde es muy bien recibido y cuenta con un amigo íntimo, Pedro Campos. Pero por ahora se ha decidido que viva en Ginebra, mucho más cerca de España y en Europa, de esta forma las distancias de los traslados son más cortas y, por tanto, más cómodas y seguras para él.

Rei emèrit Joan Carles I i rei Felip VI / Europa Press
Rei emèrit Joan Carles I i rei Felip VI / Europa Press