Como cualquier otro mortal, la familia real también es amante de los tatuajes. Aunque los llevan en zonas que no son visibles y de una forma muy discreta. Todos suelen ser pequeños dibujos o letras casi imperceptibles, muy discretos. Hace unas semanas se habló de los tatuajes en Casa Real con la revelación de María Zurita en ‘MasterChef’. Ésta confesó que lleva una rosa tatuada, y aunque no se le ve, dio a entender que Felipe VI también podría ir tatuado. “No sé si es tradición familiar, yo desde luego me lo hice por mi abuelo y mi hermano también. Le quería mucho, lo que pasa es que se murió muy pronto y le conocí menos de lo que me hubiera gustado”, dijo en ‘MasterChef Celebrity’ la tía de Victoria Federica, María Zurita, a cuenta de su propio tatuaje. Quien sabemos que lleva tatuajes de su época pasada si no se los ha borrado ya es Letizia. Pero los más jóvenes vienen pisando fuerte. Victoria Federica ya luciría uno.
Victoria Federica se ha convertido en toda una influencer. Se dedica al mundo de la moda y siempre está pendiente de las últimas tendencias. Cuenta con miles de seguidores en sus redes sociales y es una de las personalidades más demandadas por la prensa y por las marcas. La hija de la infanta Elena es adicta a la tinta, no obstante, siempre elige pequeños tatuajes que pasen desapercibidos. Elegantes y sofisticados.
Nacho Caja, el tatuador de los famosos
La hija de Jaime de Marichalar ha contado con uno de los mayores profesionales, se trata de Nacho Caja, fundador de Galería 53, quien también ha tatuado a Ester Expósito. Uno de los dos nuevos tatuajes se lo ha realizado en el cuello y el otro en el empeine. Los dos tatuajes tienen un significado muy importante para ella. En el primero se pueden leer las letras ‘Breathe’ que significa ‘respira’. Y en el del empeine aparece la silueta de Mallorca.
Los tatuajes minimalistas ahora son una gran tendencia. Nacho Caja es especialista en ello. Mallorca es la isla donde ha pasado prácticamente todos los veranos de su niñez, junto a sus abuelos, Juan Carlos y Sofía. Este mismo verano pasó unos días junto a su abuela, su madre, su tía y sus primos.
La influencer luce otros tatuajes. Por un lado, tres puntos, uno por cada persona importante en su vida, su padre, su madre y su hermano Froilán. Y un 'smiley' en la parte superior de su oreja izquierda. Porque, según dijo en una citada entrevista, es como ella se siente: feliz, alegre, divertida.
El abuelo de Felipe VI, Juan, fue el primero en tatuarse. Todos sus brazos estaban marcados por tatuajes con emotivos marinos. “Me los hice en el año 32, cuando solo tenía 19 años”, contaba el propio hijo de Alfonso XIII en una entrevista que le hizo la periodista Pilar Trenas. Contó que en aquella época era algo muy común entre los marineros.