Durante más de cuarenta años, la reina Sofía ha sido el rostro de la discreción y la lealtad institucional en la Casa Real española. Es el eje que ha mantenido el equilibrio de la corona. Cuando ha habido algún incendio, es ella quien ha mantenido la calma. Es la imagen de transparencia, quien más se ha ganado el respeto en la institución. Pero para mantener ese estatus, Sofía ha tenido que guardar muchos secretos. Y uno de ellos, uno de los más impactantes, tiene que ver con su hijo, Felipe VI, y su esposa, la reina Letizia. Un secreto devastador que, de salir a la luz, podría cambiar para siempre la imagen de la monarquía moderna.
Ese secreto ha permanecido oculto durante 21 años, exactamente el mismo tiempo que llevan casados Felipe y Letizia. Aunque los orígenes se remontan a los comienzos de su relación, mucho antes del compromiso oficial y del escándalo que rodeó su noviazgo. Si bien se ha hablado en el pasado del aborto que Letizia sufrió en México en 1996, hubo otro episodio posterior: un segundo aborto que habría tenido lugar en la Clínica Dator de Madrid.
Apuntan que el matrimonio de Felipe y Letizia es una tapadera
Lo más perturbador es que, según fuentes cercanas y periodistas como David Rocasolano, primo de Letizia, Felipe VI habría tenido un papel directo en este asunto, ordenando que se eliminara toda evidencia médica para proteger la imagen de su futura esposa y, por supuesto, la suya propia.

Las versiones más recientes apuntan incluso a que el padre biológico del feto no habría sido David Tejera, como se asumió inicialmente, sino Jaime del Burgo, ex pareja de Letizia y figura controvertida en su pasado. Expertas como Laura Rodríguez y Maica Vasco sostienen que este detalle fue clave para que Felipe decidiera dar el paso hacia el matrimonio. No por amor, sino por un pacto de intereses políticos y personales.
“Felipe sabía perfectamente lo que ocurría”, asegura Vasco. “Sabía del embarazo y sabía que el padre no era él. Lo que ocurrió en aquella cena en el Hotel Ritz, cuando Jaime iba a pedirle matrimonio a Letizia, es mucho más que un drama personal: es el origen de una alianza construida sobre un acuerdo tácito”. Letizia había conocido a Felipe y la cosa podía ir a más. Y según las fuentes, para ella fue el negocio del siglo.

La reina Sofía lo sabía todo
El acuerdo, según estas teorías, consistía en seguir con Del Burgo, pero también con la relación que acababa de empezar y mantener las apariencias. Felipe, que necesitaba una pareja por presión popular, obtendría una esposa moderna, periodista, y aparentemente comprometida con los valores institucionales. Letizia, por su parte, accedía a una posición de poder sin precedentes, siendo la primera reina consorte de origen plebeyo en la historia reciente de España.
Un pacto del que los padres de Felipe, Juan Carlos I y Sofía, estarían al tanto desde el principio. Mientras que Juan Carlos optó por el silencio, Sofía, como madre, habría decidido proteger el honor de su hijo hasta el final, incluso si eso significaba llevarse la verdad a la tumba.