Este verano es uno de los más atípicos para la reina Sofía. Por estas fechas ya debería estar instalada en Marivent, un lugar en el que encuentra paz alejada del ritmo burocrático de Zarzuela. Sin embargo, a día de hoy aún continúa en Madrid. Es una decisión que ha tomado muy seriamente y meditada con sus hermanas, Felipe VI. Debido a su avanzada edad, el mes de noviembre cumplirá 87 años de edad, y a sus problemas de salud, el monarca cree que no puede pasar tanto tiempo sola en la isla balear, y es que este año tampoco viajará Irene de Grecia por su enfermedad. La reina Sofía viajará a Marivent este lunes en compañía de su hijo, los dos solos. Una vez que ellos se marchen, si no van las infantas, la emérita tendrá que volver a Madrid a mediados de agosto.

La reina Sofía con Felipe VI
La reina Sofía con Felipe VI

Se acabaron aquellos veranos en los que se reunía toda la familia en el palacio de Marivent. Desde que estalló el caso Nóos, los monarcas no dejan que ningún Borbón viaje a Palma de Mallorca en su estancia. No pueden cruzarse. La reina Sofía siente mucha tristeza porque le gustaría ver a toda la familia unida antes de morir.

Es el primer año en el que no puede viajar ella sola y pasarse allí todo el verano, pero además es la primera vez que viajará a Palma de Mallorca en verano sin la compañía de Irene de Grecia. Hasta el año pasado aún viajó con el equipo médico, pero en esta ocasión los profesionales de la salud han dejado claro a los reyes y a la emérita que es imposible.

La reina Sofía no quiere ir a Marivent sin Irene de Grecia 

Desde que se comunicó que Irene de Grecia padecía Alzheimer, hace tres años, la enfermedad ha avanzado a pasos agigantados y prácticamente ya no recuerda a nadie, ni tan siquiera a ella misma. Ha olvidado funciones básicas y no sale de la cama. Siempre tumbada mirando al infinito.

La reina Sofía siente un fuerte dolor al ver a su hermana así. No puede soportarlo pero tampoco quiere separarse de su lado. Si Irene no va a Palma de Mallorca, a ella tampoco le compensa ir. La emérita ha dicho a Felipe VI que no quiere ir a Marivent.

Se ha encerrado en su habitación y no quiere salir, ni tan siquiera enciende la luz, baja la persiana y se queda a oscuras. Está muy triste. Llora desconsoladamente y no quiere comer. En los últimos actos se la ha visto muy delgada y débil. La preocupación en Zarzuela hay que reconocer que es máxima pero se trata con muchísima discreción.

La reina Sofía con su hermana Irene de Grecia
La reina Sofía con su hermana Irene de Grecia