La reina Sofía cumple 85 años en uno de sus peores momentos. La emérita está muy preocupada por su hermana Irene, que padece Alzheimer, tal y como confirmó la revista Lecturas el mes pasado. El estado de su enfermedad estaría muy avanzado y ya habría olvidados algunas cosas. Los reyes han puesto a su disposición un médicos todos los días para que su enfermedad avance de la forma más lenta posible. También cuenta con la ayuda de personal de servicio solo para ella las 24 horas del día. Pero no es la única preocupación de la madre de Felipe VI. Ella también observa que empieza a hacerse mayor y no ha cumplido su sueño de reunir a toda la familia. Está harta de ver a la familia dividida en dos.

La reina Sofía acompañada por sus amigos
La reina Sofía acompañada por sus amigos

Sofía de Grecia quiere morir con las botas puestas, ella siempre será reina. Hasta la fecha continúa con sus obligaciones institucionales, aunque con un menor peso debido a su avanzada edad. No obstante, siempre está disponible para cuando su hija la necesita. Aunque es la mayor de sus hermanos, Constantino falleció el año pasado e Irene presenta un importante deterioro cognitivo por su enfermedad. La emérita puede presumir de su buen estado de salud gracias a su alimentación.

La enfermedad que hizo que la reina Sofía cambiase la alimentación 

Como también le sucede a Letizia, la reina Sofía cuida mucho su alimentación. Siempre muy equilibrada y saludable, basada principalmente en la dieta mediterránea. Se conoce que la mujer de Juan Carlos I es prácticamente vegetariana, en su alimentación no cabe en ningún caso las carnes rojas. Esto se debe a que en 1964 falleció el padre de la emérita a consecuencia de un cáncer de estómago, momento que cambió radicalmente su forma de ver la vida y su alimentación. Era una de las grandes pérdidas de la reina. Es por ello que prescinde de muchos alimentos que pueden llegar a ser perjudiciales.

La reina Sofia con elena y cristina efe
La reina Sofia con elena y cristina efe

En su dieta, las verduras y las frutas son las máximas protagonistas, así como las legumbres y huevos. Se alimenta de pescado, huye de las carnes rojas. El ingrediente que nunca falta en sus recetas es el aceite de oliva virgen extra. Con éste adereza sus ensaladas, siempre pide una para acompañar los platos. Son muy saludables y frescas. También apuesta por la quinoa, una semilla rica en fibra y proteínas, sin grasas.

La reina Sofía también prescinde de cualquier tipo de bebidas alcohólicas.