La académica Carmen Iglesias, historiadora y figura muy cercana a la familia real desde hace décadas, ha vuelto a referirse públicamente a algunos de sus miembros con palabras que no han pasado desapercibidas. En su intervención reciente, Iglesias destacó especialmente a la princesa Leonor y a la infanta Sofía, de quienes habló con cariño y admiración, resaltando tanto su preparación como sus cualidades personales.
Sobre la heredera al trono, Carmen Iglesias utilizó adjetivos como “encantadora” y “empática”, subrayando la evolución que ha tenido en los últimos años y el modo en que ha asumido sus responsabilidades con naturalidad y compromiso. De Sofía, la menor de las hijas de los reyes, también expresó una opinión muy positiva, calificándola como “maravillosa” y destacando su simpatía y espontaneidad.
La historiadora no es ajena al crecimiento de ambas jóvenes, a quienes ha seguido de cerca en su formación y en su exposición pública. En sus palabras se percibe el orgullo de quien ha conocido de cerca a varias generaciones de la familia real y ha podido observar de primera mano cómo se han preparado para sus respectivos roles institucionales.
Una valoración institucional y sin excesos
En cuanto a la reina Letizia, el comentario de Carmen Iglesias fue más breve y contenido. Señaló que la reina “cumple con su papel”, una expresión que, si bien no abunda en detalles personales, transmite un reconocimiento al desempeño institucional que Letizia ha mantenido desde que forma parte de la Casa Real.

Lejos de interpretaciones personales, sus palabras parecen responder a un tono más sobrio y medido, coherente con el respeto que suele mostrar hacia los miembros de la institución. Es posible que Iglesias, como figura académica y próxima al entorno del rey Felipe, prefiera mantener cierta distancia en sus valoraciones públicas sobre figuras con las que no ha compartido un vínculo tan cercano.
En todo caso, sus declaraciones vuelven a poner de relieve la imagen positiva que proyectan Leonor y Sofía, especialmente en un momento en que ambas han ganado visibilidad pública y protagonismo. La intervención de Iglesias se suma así a otros gestos que refuerzan la confianza en la preparación de las nuevas generaciones de la familia real, manteniendo siempre un tono institucional, equilibrado y sin estridencias.