Cada año la Familia Real en pleno hace una única visita a Catalunya y los cuatro borbones que cuentan, Felipe y Letizia con Leonor y Sofía, desembarcan en el territorio menos afín en la Corona. Son los Premios princesa de Girona. Para evitar grandes problemas se entregan a finales de julio, cuando media ciudad está de vacaciones. Y no salen del coche oficial. Este año se ha celebrado la gala en el Liceo de Barcelona porque les sigue prohibido por el Ayuntamiento independentista de la capital gerundense el acceso al Palacio de Congresos de Girona. Letizia detesta Catalunya y siempre que viene a Barcelona sigue dos máximas: no bajar de la Diagonal y vestir de rojo España. Este año ha hecho una excepción y se ha desplazado hasta Ciutat Vella, probablemente el único lugar de Ciutat Vella que ha pisado: el Liceo. Y en lugar de vestir de rojo ha obligado a toda la familia a vestir de oscuro riguroso, como si fueran al funeral del abuelo Juan Carlos. La estampa, con el fondo negro del escenario, parece un fragmento de La Casa de Bernarda Alba:

Quien no lo perdona es la cronista barcelonesa más perspicaz: Pilar Eyre, que escribe a Lecturas: ": "¿Por qué de luto? ¿Letizia, Felipe y Leonor de negro y Sofía casi de negro, como un paso de Semana Santa? Y me sorprende ver a la reina tan abrigada cuando la temperatura era de treinta grados y sin embargo en invierno lleva vestidos de seda con tirantes y va sin medias. Leonor y Sofía no pueden ser más guapas, pero me entristeció la elección del negro para unas chicas jóvenes cuando la moda, el verano, las revistas están llenos de luz, colorido y alegre ambiente festivo. ¿O es que consideran quizás que el ambiente no es tan festivo y de ahí que hayan utilizado el negro? Como la original frase que solemos aplicar a Letizia es que “no da puntada sin hilo”. El mensaje de Letizia a los catalanes es este: no os perdonemos el procés, seguimos en guerra, la Corona no se siente próxima a Catalunya.

El contraste con la vieja Familia Real es brutal. Los eméritos y sus tres hijos iban para|por Barcelona como si fuera su casa, cogiendo incluso la línea verde del metro, la que va a Pedralbes: "La reina Sofía compraba en el Corte Inglés de Diagonal, yo he visto a la infanta Cristina cuando era poco mayor que Leonor en metro y a Elena bailando en el Up&Down. Felipe regateaba con compañeros de todas las procedencias y despuéscomía en el Club Náutico un bocadillo de pie, mezclado con todos. Oriol Maspons se encontró un día a Juan Carlos saliendo de la casa de una amiga cerca del hotel Ritz y se acercó a él porque lo conocía de Ibiza. El rey le pegó un abrazo y se quedó charlando y fumando un puro hasta que seguridad lo obligó a marcharse. Antes de subir al coche le dijo “no sabes laenvidia que me das ¡vivir en Barcelona!” “Pues venid más”, le dijo Oriol y Juan Carlos guiñó el ojo y señaló la casa de la que acababa de salir, “en realidad vengo muy a menudo”. Sofía venía a gastar, Felipe a navegar, Elena a bailar, Cristina a trabajar y Juan Carlos en fo...