Paloma Rocasolano se llevó una gran alegría cuando Letizia le confirmó los rumores que sonaban en la peluquería, mantenía una relación secreta con Felipe VI, el entonces príncipe de Asturias. No podía creerse que su hija iba a convertirse en la futura reina de España si se materializaba ese enlace. La relación avanzó muy rápido y ni tan siquiera le dio tiempo de asimilarlo, en poco tiempo ya estaba ante los medios de comunicación en la boda del siglo, en la Catedral de La Almudena.

Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz GTRES
Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz GTRES

David Rocasolano siempre había dicho que la familia de Letizia era una muerta de hambre. En la biografía que escribió sobre la reina, que le costó la ruptura definitiva con Letizia, desvelaba que no tenían ni para comer. Uno de los platos más recurrentes eran las acelgas, por eso en el pueblo siempre le llamaban “los acelgas”. Además, cuando iba a visitar a sus primas a su casa en invierno siempre llevaban un edredón envuelto y calcetines gordos, tenían los labios morados, y es que tampoco tenían para calefacción.

La enfermera jubilada abandonó Asturias por la oportunidad laboral de Jesús Ortiz que podría sacarles de esa ruina porque según David Rocasolano, el comunicador no trabajaba en Oviedo, era muy vago. No traía dinero a casa, la única que se esforzaba era su entonces mujer. Pero el matrimonio se separó por una supuesta infidelidad.

La vida de Paloma Rocasolano cambió cuando Letizia se casó con Felipe VI 

Paloma Rocasolano se divorció de Jesús Ortiz y cuando sus hijas ya no vivían con ella se instaló en una buhardilla de 37 metros cuadrados en el centro de Madrid, lo único que muchos jóvenes pueden permitirse a día de hoy, y ni eso.

Sin embargo, cuando Letizia se casó con Felipe VI la vida de Paloma Rocasolano dio un giro de 180 grados. Era una mujer distinta, tuvo acceso a lo que nunca había tenido. Además aprovechaba y siempre decía que era la madre de la reina para conseguir sitio preferente o importantes descuentos y regalos. Se convirtió en una nueva rica. Paseaba por la Milla de Oro de Madrid y entraba a las tiendas más exclusivas. Incluso sus vacaciones cambiaron, de Benidorm a Dubai, Grecia, embarcada en aviones privados y lujosos yates. Nunca se había visto en otra película. Hasta ahora que mantiene una relación con Marcus Brandler viviría una vida de ensueño, ha conseguido lo que Jesús Ortiz nunca pudo darle. Y todo eso lo hace con una pequeña pensión de jubilación.

Paloma Rocasolano
Paloma Rocasolano