Los Ortiz Rocasolano eran una familia muy humilde. La boda de Letizia y Felipe VI les vino como anillo al dedo. Paloma Rocasolano sabía que su hija llegaría muy lejos, pero nunca se imaginó que tanto. Era una mujer muy ambiciosa. Ahora se aprovecha de ser la madre de la reina y consigue mucho privilegios. La vida de todos los miembros de la familia ha dado un giro de 180 grados, aunque la monarca siempre les ha pedido que se mantengan en un segundo plano, demasiado tiene ya con los Borbón, su mayor quebradero de cabeza.

La única persona de los Ortiz Rocasolano que se ha atrevido a sacar provecho de esta situación ha sido David Rocasolano. El primo de la reina escribió una biografía no autorizada donde explicaba detalles de la familia que nadie había destapado. Fue el primero en hablar de los supuestos dos abortos de Letizia, pero también de la pobreza de la familia. Recordó cada vez que iba a casa de sus tíos para pasar tiempo con sus tres primas. Le abrían la puerta con los labios morados del frío que hacía en aquella casa. Estaban recubiertas con mantas y varios calcetines. No tenían ni para una estufa. Y no le gustaba ir porque el menú era siempre el mismo, acelgas.
Las hijas de Paloma Rocasolano hicieron todo lo posible para huir de aquella vida
Jesús Ortiz no traía dinero a casa, no era un periodista de éxito. David Rocasolano recuerda entre sus páginas que cuando él iba a casa de Letizia a visitar a sus primas, “sus primas le visitaban con los labios morados, envueltas en sábanas y en pijamas dobles, con calcetines porque no tenían ni para encender un brasero, no tenían ni para comer”. David Rocasolano llamaba a aquella casa “la casa de las acelgas”. “Se comía, desayunaba y cenaba acelgas, por ello estaban tan delgados”, lee Maica Vasco. En el pueblo ya les llamaban “los acelgas”.
Por este motivo todas las hijas de Paloma querían huir de aquella vida. Eran muy ambiciosas, no querían quedarse con la infancia que habían vivido. De adolescente, Telma Ortiz intentaba dormir en casa de alguna amiga todos los fines de semana para poder comer bien y estar caliente.
Letizia ayudó a su madre y a su hermana cuando se casó con Felipe VI. La reina consiguió a Telma un trabajo en una ONG por el que cobra mile de euros al mes. No tiene problemas económicos, de hecho ha pasado a conducir un coche de 85.000 euros.
La página web de Concordia reveló parte de su currículum profesional y personal, a Telma "le apasiona el trabajo humanitario y la responsabilidad social. Crea relaciones fácilmente y las construye de forma sólida para que sean duraderas y leales". En el portal se encuentra el currículum completo de la hermana de la Reina, que "tras graduarse en la Universidad de Barcelona, obtuvo un posgrado en Economía Internacional y una Maestría en Administración de Empresas y Marketing entre Roma, México y Barcelona”.
