La reina Letizia y su hija, la princesa Leonor, se han reencontrado después de cuatro meses separadas. El tiempo que la heredera ha estado a bordo del Juan Sebastián Elcano siguiendo con su formación naval, haciendo prácticas en cubierta con los compañeros y llegando a puerto en diferentes países como Brasil, Uruguay, Chile, Perú o ahora, Panamá. La joven Borbón y su madre tienen una relación muy estrecha y este tiempo separadas se ha hecho muy duro de llevar tanto para la una como para la otra, ya que solo han podido comunicarse de vez en cuando vía móvil. Por eso, a la mínima que ha habido oportunidad, la asturiana no lo ha dudado, ha cogido el avión y ha ido hasta Panamá para ver, tocar y abrazar a su hija después de todo este tiempo que no lo ha podido hacer.

Y ha ido sola, suficiente para las dos, que han aprovechado los momentos juntas una vez la princesa puso pie en el suelo. Después de la emoción del reencuentro, madre e hija se han puesto al día y han aprovechado este nuevo parón del buque-escuela para ir juntas a cenar, sin el resto de cadetes compañeros de Leonor, ni tampoco su novio. Tampoco había cámaras que fueran con ellas, cámaras oficiales, pero sí en uno de los locales que han visitado juntas.

Después de las recepciones oficiales institucionales, escapada nocturna para saborear la gastronomía local de la zona a uno de los restaurantes que les han recomendado, 'El Nacional, especializado en productos de la tierra y comida de casa, tradicional, con muy buenas críticas y una relación calidad-precio muy elogiada por los comensales (como si eso fuera un problema para la reina y la princesa). Un establecimiento especializado en tamales y ropa vieja, dos de los platos por excelencia, y donde han disfrutado de una "vibra muy buena", según explican testigos a Vanitatis. Un menú variado donde este sábado por la noche han podido degustar en el barrio viejo de Panamá. Letizia y Leonor, como dos turistas encantadas de la vida... Pero los que verdaderamente estaban encantados de la vida fueron los del restaurante, que se pellizcaban de incredulidad ante la presencia real de la joven Borbón y su madre: "Llegaron súper relajadas, muy sencillas y pidieron de todo un poco: tamales, ropa vieja y varias cositas más de nuestra cocina panameña. Estaban curiosas y con ganas de probar". No pasa cada día que tienen una reina española y la heredera, por eso, corrieron rápidamente a hacerse una foto que inmortalizara la visita... momento en el cual se encontraron con una petición de Letizia, agobiada y nerviosa.

"Al final se tomaron una foto con el equipo del restaurante, lo cual fue un detalle que nos emocionó muchísimo", dicen desde 'El Nacional', pero Letizia le vio las orejas al lobo y se temió lo peor, que si los del local publicaban ipso facto la foto, con ellas dos todavía allí dentro, habría habido demasiados visitantes curiosos: "Por temas de seguridad, nos pidieron no publicar nada en el momento". Finalmente, un día después, este domingo por la noche, les han dado permiso para publicar esta foto: "Un momento muy emocionante conocer de cerca a parte de la familia real. ¡Ayer vivimos un momento histórico! Tuvimos el honor de recibir en El Nacional a nada más y nada menos que a la Reina Letizia y la Princesa Leonor de España. Un encuentro inolvidable que nos llena de orgullo y reafirma nuestro compromiso con la cultura, la hospitalidad y los sabores de Panamá. ¡Gracias por visitarnos y ser parte de nuestra historia!".

Una buena vibra..., pero si la vibra se puede posponer, mejor que mejor, han pensado Letizia y Leonor.