No decimos nada nuevo al comentar la obsesión que tiene la reina Letizia por su apariencia física. La esposa del rey Felipe VI cuida hasta el último detalle. Empezando por su constitución y acabando por los looks que elige en sus apariciones públicas. En esto último, la consorte elige siempre las combinaciones con mucho cuidado. Sabe que los objetivos de los paparazzi se centrarán en sus atuendos, y no deja nada al azar. En lo primero la cosa es más elaborada.
Por un lado, Letizia sigue una dieta estricta en la que no tienen cabida los azúcares, los fritos o las grasas. En la medida de lo posible limita sus comidas a verduras, frutas, pescados o purés. Mientras tanto, sigue una rutina deportiva a rajatabla. Letizia practica deporte a menudo para tonificar el cuerpo y evitar cualquier flacidez. En muchas fotos hemos visto lo musculada que está, prueba de su constancia con las tandas de ejercicio.

A la reina Letizia se le mueven los dientes
Pero eso no es todo. La esposa de Felipe VI también se ha sometido a algunas intervenciones de estética. Expertos y expertas aseguran que se ha retocado zonas del rostro como la nariz, la barbilla o los pómulos, entre otros. Además, también ha usado corrector dental para recolocar su dentadura.
No obstante, Letizia empieza a tener problemas en los dientes. Tal y como señalan en La Razón, “las últimas fotografías de la Reina Letizia revelan que sus dientes están cambiando de posición”. En el portal digital del diario señalan que, “tras haberse realizado una ortodoncia con brackets de zafiro en 2010, no ha hecho buen uso de los retenedores y sus dientes se están moviendo”.

El problema se debe a no haber usado correctamente los retenedores
Además, desde el medio han hablado con la doctora Eugenia Cervantes, experta en la materia, que corrobora la información. “Viéndola sonreír en sus últimas apariciones, he notado que sus dientes están cambiando ligeramente de posición, en especial uno de sus caninos, del lado izquierdo”, señala Cervantes. Un problema que le estaría pasando por el mismo motivo que a otras personas: “Que no llevan un adecuado sistema de retención postortodoncia”.
Este inconveniente tiene un nombre, “recidiva”. Y se debe a que los dientes tienen memoria. Es decir, si no se usa correctamente un retenedor tras un tratamiento con brackets, los dientes buscan volver a su posición original, llegando incluso a provocar que el paciente tenga que usar aparatos de nuevo. “Al finalizar tu tratamiento de ortodoncia debes llevar los retenedores de por vida, de lo contrario, se producen recidivas, es decir, que es cuando los dientes que ya están en una posición adecuada se van moviendo hacia la posición inicial. Los dientes tienen memoria y si no llevamos los retenedores, al menos por las noches, se irán moviendo al punto de echar a perder todo lo conseguido con la ortodoncia. En estos casos, el paciente tendrá que llevar nuevamente un tratamiento con brackets o alineadores invisibles para corregir ligeras malposiciones, algo que probablemente tendrá que hacer la Reina Letizia", explica la doctora Cervantes para La Razón.