El Teatro Campoamor de Oviedo volvió a ser el escenario de los Premios Princesa de Asturias. Se celebraron con todo el esplendor que caracteriza a la cita más importante del calendario institucional. Una noche cargada de emoción, en la que la princesa Leonor volvió a acaparar los aplausos. Su discurso, impecable y seguro, confirmó que está cada vez más preparada para asumir su papel como futura reina de España.
Felipe VI no ocultó su orgullo. En sus palabras, llenas de emoción, reconoció el proceso natural de relevo: “Leonor ha ido asumiendo gradualmente esta tarea”, dijo ante un público que lo ovacionó de pie. Para el rey, fue un momento de satisfacción y ternura. Igual que para la reina Letizia.

La reina Letizia está detrás del perfeccionamiento oratorio de Leonor
La consorte ha sido la principal responsable del perfeccionamiento oratorio de Leonor. La ha hecho ensayar durante horas, cuidando cada gesto, cada pausa, cada palabra. Su experiencia como periodista y presentadora le ha permitido transmitirle seguridad y dominio escénico.
Sin embargo, no todo fue motivo de felicidad para la consorte. Porque a Letizia no le importa tanto que Leonor le robe protagonismo como el que lo haga la reina Sofía. Su presencia, siempre esperada y mediática, generó titulares y gestos de cariño por parte del público. Los aplausos a su llegada al teatro fueron más sonoros que los dedicados a Letizia. En algunos medios, incluso, se la volvió a describir como la “reina querida por el pueblo”. Un contraste que no pasó desapercibido para la consorte de Felipe VI.
Letizia vuelve a quedar como la mala de la película
Después de la ceremonia, el ambiente en la familia real fue tenso. Letizia se mostró seria, distante, evitando los gestos de complicidad habituales con su marido. Algunos testigos aseguran que apenas cruzaron palabras durante el acto y que, una vez finalizado, cada uno siguió su camino. Mientras Felipe VI regresó a Madrid para retomar su agenda institucional, Letizia decidió quedarse en Asturias unos días más. Oficialmente, para “descansar”. Extraoficialmente, porque estaba dolida y molesta. Al parecer, Letizia no quiere soportar más comparaciones con su suegra.

No solo eso. Le han molestado comentarios de la prensa que sitúan a Sofía como una víctima de Letizia, con portadas afirmando que está apartada y que todo tiene que ver con su mala relación con su nuera. En esta línea, los rumores de tensión en la pareja real han vuelto a resurgir con fuerza. La escena ha hecho que vuelvan los rumores acerca de una ruptura familiar y de la tensión que se vive en la corona española.