Última semana de Leonor en el Blas de Lezo, está siendo una aventura breve pero muy intensa. En la fragata el nivel de exigencia y disciplina aumenta, y es que en esta ocasión no está de paseo en un buque escuela sino que simula una guerra real, un enfrentamiento con otras embarcaciones. Hay un total de 12 y casi 2.000 militares. Una vez finalice esta formación, la hermana de Sofía concluirá su etapa con la Armada en el Juan Sebastián Elcano. La semana que viene se reunirá con sus compañeros para llegar a Marín ya convertida en oficial. Allí recibirá la máxima condecoración del ejército y ya tendrá dos, tierra y mar. A finales de agosto iniciará su formación con el ejército del aire, donde después de un año por fin concluirá su etapa militar. La princesa tiene muchas ganas de acabar esta formación porque está siendo especialmente dura para ella. Además, en su caso, aunque sea la próxima futura heredera al trono, no es vocacional ni tiene pasión por las armas.

Leonor subiendo a la fragata Blas de Lezo
Leonor subiendo a la fragata Blas de Lezo

La semana pasada participó en su primer combate, y aunque puso toda su voluntad hay que reconocer que fue un absoluto desastre. La hija de Felipe VI participó activamente en el ejercicio Sinkex-25, unas maniobras navales con fuego real en aguas del suroeste de Canarias, aunque necesitó ayuda de sus compañeros, incluso para sostener el arma, que pesaba más que ella. Le dio mucho miedo disparar a blancos en el mar. Ha sido un ejercicio totalmente real con misiles, y es que la princesa tiene que aprender a manejar las armas.Desde el Centro de Información y Combate del navío, Leonor ha seguido en primera línea el lanzamiento de misiles Harpoon y torpedos contra blancos navales, culminando con el hundimiento de un antiguo buque fuera de servicio.

Leonor quiere abandonar la fragata Blas de Lezo 

Sus compañeros y los oficiales no la ven capacitada, por ello intentan ayudarla, para que estas dos semanas no se conviertan en un infierno para ella. Bastante tuvo ya con los cinco meses a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano, separada de su familia y amigos.

Leonor no está sola en el camarote, duerme con otras tres compañeros, por ello saben que llora por las noches. Se está viendo superada por la presión de este reto, la disciplina y la exigencia, no tiene el nivel. La princesa ha llamado personalmente a sus padres y les ha explicado que esto está siendo muy complicado. Pide volver a casa, pero le dicen que aguante, tan solo le queda una semana y concluirá su etapa en la fragata.

Princesa Leonor en la fragata Blas de Lezo / Casa Real
Princesa Leonor en la fragata Blas de Lezo / Casa Real