La princesa Leonor, heredera del trono de España, podría estar enfrentando un problema de salud que preocupa dentro de la Academia Militar de San Javier. Según informaciones recientes, la joven habría heredado de su padre, el rey Felipe VI, una enfermedad neurológica que ya le causó dificultades durante su adolescencia: la narcolepsia.

La narcolepsia es un trastorno crónico del sueño que provoca somnolencia diurna extrema y episodios repentinos de sueño profundo. Las personas que la padecen pueden quedarse dormidas en cualquier momento, incluso durante una conversación o una clase. No existe cura. Y aunque los tratamientos médicos ayudan a controlar los síntomas, el impacto en la vida diaria puede ser considerable.

La princesa Leonor en San Javier Casa Real
La princesa Leonor en San Javier Casa Real

Las exigencias de San Javier pasan factura a la princesa Leonor

Fuentes cercanas a la Casa Real recuerdan que Felipe VI también vivió episodios preocupantes durante su juventud. El periodista Jaime Peñafiel reveló hace años que el monarca mostraba un cansancio constante, dificultades académicas y una tendencia a dormirse de pie o durante las clases. Este comportamiento, inicialmente atribuido a la adolescencia, podría haber sido consecuencia directa de la narcolepsia, una condición que entonces no fue tratada públicamente por el equipo médico real.

Hoy, los rumores sobre Leonor se multiplican dentro de la Academia General del Aire de San Javier, donde cursa su formación militar. Según varios compañeros y fuentes internas, la princesa se ha dormido en clase en más de una ocasión, generando preocupación entre los instructores. Aunque la Casa Real no ha emitido ninguna declaración oficial, algunos docentes han sugerido la posibilidad de ajustar sus horarios y rutinas para permitirle un descanso más controlado.

La princesa Leonor en San Javier Casa Real6
La princesa Leonor en San Javier Casa Real

Trato preferencial para la heredera

Además, la situación ha tenido repercusiones en el ambiente de San Javier. Algunos compañeros expresan preocupación y empatía, mientras que otros señalan que la situación ha provocado ajustes en el ritmo académico del grupo, siempre en pro de favorecer a la futura reina. Aunque no hay confirmaciones oficiales, la preocupación es real: los episodios de sueño involuntario pueden ocasionar incidentes durante prácticas o maniobras si no se controlan adecuadamente.

La narcolepsia, aunque poco común, tiene un componente genético reconocido. Por ello, los especialistas no descartan que Leonor haya heredado la predisposición de su padre. De momento, como siempre, la discreción domina en Zarzuela. Pero en los pasillos de San Javier, los rumores crecen. Si la princesa Leonor realmente enfrenta esta enfermedad, su capacidad para mantener el equilibrio entre deber, salud y responsabilidad pública será puesta a prueba muy pronto.