Leonor cierra su primera semana con el ejército del aire en la Escuela del Aire de San Javier. Empezó las clases el pasado 1 de enero, aunque es esta semana cuando el ritmo se vuelve más acelerado para ella. Esta formación es la más complicada. Si el ejército de tierra o la armada fue para ella un reto, esta se convierte en una pesadilla. La princesa tiene fobia a las alturas. En su avión privado no tiene miedo, pero siendo la pilota de una aeronave sí, la visión cambia completamente. Por ahora durante los primeros meses recibirá clases teóricas y se preparará para pilotar un Pilatus PC-21 a través de un simulador. En el momento en que esté lista para el vuelo lo hará siempre con un instructor. No solo por su miedo a volar, sino porque para el ejército de aire, así como para la corona, lo primordial es la seguridad de la princesa, la futura reina de España.
Como los años pasados, Leonor duerme en el cuartel con otras compañeras. La habitación dispone de literas con otras tres personas más y el baño es compartido, uno para mujeres y otro para hombres. El horario de clases es similar. Se levanta a las 6:45 para arreglarse y desayunar, alrededor de las 7:30 empiezan las clases, y a las 22 horas ya duermen. Si no tiene ningún castigo puede salir los fines de semana, a partir del viernes por la tarde tienen permiso.
Leonor sale de fiesta con sus compañeros de la Escuela del Aire
Este ha sido el primer fin de semana de Leonor con sus nuevos compañeros y se ha integrado a la perfección. Son los alumnos de cuarto curso y parece que ella lleve con ellos los cuatro años. La han recibido con los brazos abiertos ya que su presencia ha generado una gran expectación. Tienen en clase a la futura reina de España, y algunos terminarán siendo amigos de ella.
Leonor salió con sus compañeros por la zona de San Javier, que está a escasos metros caminando del cuartel. Estuvieron tomando algo en un pub de la zona y después salieron de fiesta. Llegaron el domingo de madrugada, casi cuando salía el sol. La princesa ha causado estragos en la madrugada del sábado. Aunque Letizia siempre la controla, cuando no está su madre se le va la fiesta de las manos. Como cualquier joven de su edad, a la hermana de Sofía le gusta el vodka, una de sus bebidas alcohólicas favoritas, y también, aunque no hay ninguna fotografía para corroborarlo, solo testigos, fumaría cigarros electrónicos.
